Pachuca y Puebla empataron 0-0 en el Hidalgo. Los Tuzos tuvieronchance de ganar pero el "Chucky" Lozano, quien reapareció en lascanchas, falló un penalti. Ahí se fue la mejor ocasión de rompereste juego que de plano arrancó bostezos y uno que otro chiflidoen ambas aficiones.
EL JUEGO
El primer tiempo fue un ensayo. Casi un entrenamiento para elPachuca, que decidió salir a jugar sin centro delantero. Pocos,por no decir que ningún equipo del mundo de manda semejante lujo.El Barcelona, si acaso...
La ausencia de un referente adelante condicionó el accionar delos Tuzos. Los anfitriones fueron más en todo. En posesión; entoque; en seguridad; en fin, superioridad sin reflejarla en elmarcador.
Claro, se acercó con algún disparo de Guzmán que fue atajadoen gran forma por Campestrini pero nada más. Fuera de eso y otrointento del "Chucky" Lozano, no se dio mayor inquietud para elconjunto de Cardozo.
Así, las cosas se dieron muy a modo para los visitantes. Pueblafue ordenado y con eso le bastó para no verse dañado. Al fin y alcabo, sacar puntos era el objetivo.
Sus centrales, sin inquietarse, se limitaron a cuidar lasembestidas de Lozano y Urretaviscaya, escalonando a sus laterales,sin apuro. El descanso sin goles fue una consecuencia de todo loque dejaron de hacer los hidalguenses.
Aferrado a su variante, Alonso casi acierta cuando el "Chucky"Lozano agarró al Puebla en un contragolpe, mano a mano, y fuefauleado por Gutiérrez en él área. ¡Penalti!
Fue el mismo Hirving quien ejecutó. De mala forma, desviado,haciendo mayores los reclamos de Campestrini y su banda, quesentían rigorista la marcación.
Arruinada la idea, Alonso dio marcha atrás y mandó a FrancoJara al campo. Para ese entonces, La Franja había ganado confianzay hasta se animaba a probar con un tiro lejano al "Conejo"Pérez.
Los Tuzos fueron a más con Figueroa y Rodríguez, buscandoresolver el bocado que se les atragantaba. Y no se pudo. Pachucaacabó trabándose sin caminos, sin ideas, ante un Puebla resueltoa llevarse el puntito, que le servirá para salvarse.
Buen negocio de Cardozo, porque este juego no dio para más...el anfitrión nunca definió.