Pumas vive una tormenta, los universitarios fueron a suelo hidrocálido y salieron electrocutados. Un rayo los partió y los dejó al borde del adiós del torneo copero. Sólo un milagro les da su pase a la siguiente ronda.
Daniel Álvarez logró la descarga eléctrica, sólo fue una, pero potenciada por la lluvia que cayó, logró dejar fuera de combate a los felinos. El “Fideo” se escurrió y anotó.
Pumas se estancó en el último lugar del Grupo 4 con 3 puntos, Necaxa llegó a 9 y avanzó a la siguiente fase.
David Patiño acumuló más presión, el domador auriazul tiene el respaldo de su directiva, pero el oxígeno se le agota. León es su siguiente reto.
EL PARTIDO
Los rayos no llegaron solos al Victoria, Tláloc los acompañó, Pumas arrancó la batalla contra viento y marea.
La llovizna cayó con intensidad, ambos equipos buscaron adaptarse lo más rápido al campo y al mismo tiempo aprovechar las condiciones climatológicas.
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Necaxa tomó la iniciativa, los locales comenzaron a bombardear al “Pollo” Saldívar con remates de lejos. Alfredo se mostró sólido hasta que no pudo atrapar un fogonazo de José Medina, el portero auriazul dio rebote, el “Gasolinero” Barragán se avivó y con magia le dejó el balón al “Fideo” Álvarez para que moviera la red.
A Pumas los partió un rayo, pero siguieron al frente.
Patiño eligió a un cuadro joven para intentar segur con vida en el torneo copero, Matías Alustiza, Juan Iturbe y David Cabrera fueron los elementos de experiencia. El resto de la manada estuvo conformada con cachorros como Andrés Iniestra, Brian Figueroa y Adolfo Domínguez.
La lluvia siguió de forma intensa, el espectáculo no fue el mejor en el campo mojado del Victoria.
Los recursos fueron los mismos, tiros de lejos y esperanzados a rebotes de los porteros. Alustiza y Figueroa probaron suerte, pero Yosgart Gutiérrez se mostró seguro, él no soltó el balón.
Pumas tomó protagonismo, el “Chavo” lo intentó varias veces de la misma forma, uno de sus tiros ya estaba en la red, sin embargo Yosgart voló y de forma milagrosa evitó el zarpazo.
Necaxa lució desarticulado, el agua les provocó cortos circuitos.
El “Gullit” Peña intentó guiar los embates, pero los pases fallados fueron muchos. Barragán dejó de tener contacto con el balón y el peligro se fue.
Los auriazules cerraron mejor, pero el tiempo se les agotó.
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EL COMPLEMENTO
Al volver al campo Patiño decidió darle ingreso a Alan Acosta en busca de más poder en la ofensiva.
El juego no fue tan diferente. La lluvia cesó, pero los estragos en el campo ya estaban hechos.
Leaño también movió a algunas piezas de su tablero, Marcelo sacó al “Gullit” y metió a Claudio Riaño.
Las piezas felinas embonaron mejor, Pablo Jáquez estuvo cerca de emparejar el marcador, Gutiérrez se puso la capa de héroe otra vez.
El juego se volvió de ida y vuelta, Pumas requería rugir para seguir con vida en la copa. Yosgart estuvo atento a todo.
Los hidrocálidos trataron de aprovechar esos espacios en el campo, el “Pollo” y su zaga tuvieron mucho trabajo.
El tiempo comenzó a extinguirse, Patiño quemó a sus últimas cartas con los ingresos de Carlos Gutiérrez y Omar Islas.
Los embates felinos crecieron, Mendoza estuvo cerca, pero el poste le negó su rugido.
Necaxa soportó todo, los universitarios mostraron algo de garra, sin embargo no les alcanzó.
El reloj llegó a su fin y Pumas casi consumó su fracaso copero.
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