San Salvador.- Un día después de lo planeado, luego de que las intensas lluvias hicieran de las suyas en la capital salvadoreña, la Cuna del Mágico González vio el arranque de la competencia de levantamiento de pesas. La dinámica es simple, una tarima frente a las gradas, donde el ser humano prueba los límites de la fuerza.
La monotonía de la competencia se rompe cada que las pesas caen, el estruendo del metal que golpea el escenario tras el pitido que rompe la tensión del levantamiento. Una y otra vez, hasta que vence el más fuerte.
México estuvo presente en el debut de la disciplina, con el neoleonés Juan Barco como medallista de plata en la prueba de envión, dentro de la categoría de los 55 kilógramos.
El mexicano se vio sólido en su presentación al levantar 137 kilos en un ascenso constante que comenzó con 131 kg, que crecieron a los 134 en su segundo intento y que finalmente terminaron en los 137, apenas un kilo por debajo del colombiano Miguel Suárez, dominador absoluto de las acciones.
El campeón panamericano José Poox no tuvo su mejor día. El campechano se notó frustrado tras los intentos fallidos, tras iniciar con 129 kg y quedarse corto en sus últimas dos oportunidades, al no poder concretar los 133 kg, que lo habrían potenciado al podio.
En la modalidad de arranque, los mexicanos comenzaron fuertes, al ubicarse en los primeros lugares, sin embargo, poco a poco fueron perdiendo terreno.
El mejor ubicado fue José Poox, al ubicarse en el cuarto lugar, con un registro de 103 kg. El tricolor trató de llevar su cuenta hasta los 105 kg, pero no lo consiguió. Barco, mientras tanto, se ubicó en el séptimo puesto con un peso de 100 kg. La prueba una vez más fue dominada por Miguel Suárez, quien se llevó el oro al levantar 106 kg, seguido por el cubano Raibet Machado y el puertorriqueño Howard Roche, con registros de 105 kg.
A diferencia de lo que ocurre en Juegos Olímpicos y otras competencias, en los Juegos Centroamericanos no se entrega medalla por el total.
Juan Barco, satisfecho con la plata
En apenas unos meses, el neoleonés Juan Barco ha pasado de ser una promesa juvenil a una realidad en la categoría mayor. A sus 21 años, esta medalla le da la confianza necesaria para pelear por un lugar en los Juegos Olímpicos de París 2024.
“Muy feliz con el resultado, la verdad, se dio el resultado que esperaba. Fue un poco complicado el inicio pero gracias a dios pudimos recuperar la confianza, revertir el resultado y obtener una buena medalla”, dijo el halterista en entrevista con ESTO.
“El objetivo principal era pelear por una medalla, ya si se obtenía o no era hacer un buen papel, pero gracias a Dios hicimos un buen papel y obtuvimos una medalla. Esta medalla motiva mucho porque quiere decir que vamos por buen camino. Vienen grandes cosas y estamos preparados para lo que venga”, aseguró.
Barco se ha consolidado como uno de los halteristas con mayor proyección de México. En categorías juveniles ganó múltiples medallas en Olimpiadas Nacionales. Su andar por la categoría mayor comenzó hace poco. Entre los buenos resultados obtenidos está el decimosegundo lugar obtenido en el Campeonato Mundial de la especialidad, en Bogotá 2022.
De esta manera, Juan Barco se consagró como el segundo mejor halterista de la región tras ganar la medalla plata en los Juegos Centroamericanos San Salvador 2023.
Nota publicada en ESTO
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