En todo un misterio se ha convertido la desaparición de unatortuga gigante del zoológico de Okayama, en Japón, pese a lavigilancia de las cámaras de seguridad.
El parque Shibukawa es una obligada visita a esta prefectura porser la atracción turística principal y se caracteriza porquealgunos de los animales deambulan sin restricciones.
Esta medida hace posible a los visitantes que entren en contactocon los animales, puedan tocarlos y jugar con ellos.
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Ese era el caso de “Aboo”, una tortuga gigante de 55kilogramos de peso, que estaba en libertad y de acuerdo a imágenesde las cámaras de seguridad, deambulaba cerca de la entrada delparque la última vez que se le vio.
Aboo, una hembra que mide alrededor de un metro de largo, tieneunos 30 años de edad y no es probable que dañe a los visitantes ocualquier otro humano, indicó el vocero del zoológico a laagencia Kyodo.
Pero no es la primera vez que la tortuga se escapa, pues yahabía desaparecido apenas el pasado 21 de julio y fue encontradaen un camino cercano al zoológico.
Sus cuidadores confían en recuperarla pronto, pues, obvio, sedesplaza con lentitud y seguramente será encontrada en losarbustos que rodean al zoológico.
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||Con información de Notimex||
