/ lunes 4 de abril de 2022

El club que rescata a futbolistas de la guerra

Un equipo de la cuarta división francesa lanzó una iniciativa inédita: rescatar del conflicto a futbolistas profesionales de la liga ucraniana

El AS Poissy, un club de la cuarta división francesa, ha puesto en marcha una inédita iniciativa en ese país: rescatar de la guerra a futbolistas profesionales de la Liga ucraniana, hasta el momento seis.

Todos ellos proceden del club de segunda división FC Alians, con sede en la ciudad de Sumy, en el noreste del país y una de las primeras en ser asediadas por las tropas rusas. También, hace tres semanas viajó con destino a Poissy su entrenador, Youri Yaroshenko, de 61 años y exfutbolista profesional del FC Zoryá Luhansk.

"Casi no dormimos desde que comenzó la guerra, ahora moralmente y psicológicamente estamos mejor, aunque la cabeza siga estando en Ucrania", dijo el técnico durante un entrenamiento celebrado en la sede de su nuevo club, en Poissy, una ciudad de la periferia de París.

Con ayuda de un intérprete, Yaroshenko observa el entrenamiento en el centro deportivo de la entidad sin dar indicaciones. El veterano entrenador no ejerce como tal, pues el club ya tiene a su técnico principal, Walid Aichour. Aunque el preparador ucraniano es una ayuda para la adaptación de sus compatriotas.

"Si la guerra se prolonga mucho nos quedaremos aquí, aunque esperamos que se acabe rápidamente… Lo que ocurre allí está siendo una tragedia", dijo Yaroshenko, quien agradeció la hospitalidad y el empeño del presidente del club Poissy, Olivier Szewczuk.

Ucraniano por el lado paterno, Szewczuk gastó varios miles de euros de su bolsillo para traer a los jugadores y el entrenador desde Turquía, país en el que estaban haciendo la pretemporada cuando estalló la guerra el pasado 24 de febrero.

Foto: EFE

AYUDA LEGAL Y SOCIAL

"No podíamos traer a veinte, al final se quedó en seis. El resto de la plantilla está en diferentes lugares", contó el dirigente, dueño de un pequeño negocio y que ha contado con la contribución financiera de otras empresa para su iniciativa. Se ha implicado también en encontrar alojamiento a los futbolistas y ayudarlos con la parte burocrática para legalizarlos.

Sin embargo, Szewczuk se inquieta por la demora en el tratamiento de los documentos y, sobre todo, porque aún no puedan debutar al carecer de la ficha profesional homologada.

"No sé cuánto tiempo van a aguantar así, esta gente es profesional y entrena para jugar. Un francés que jugaba en Ucrania tiene la ficha automática para regresar, pero un ucraniano que viene aquí, no", lamentó.

El ucraniano más talentoso de los seis jugadores reclutados por el Poissy se llama Kostyantyn Yaroshenko, y se formó en el Shakhtar Donestk e internacional ucraniano sub-21.

"Cuando entrenamos nos olvidamos de lo que está sucediendo allí, aunque sólo sea por media hora", dijo Yaroshenko al poco tiempo de terminar el entrenamiento de este jueves.

El habilidoso medio, de 35 años e hijo del entrenador Youri, dijo estar adaptándose bien al Poissy y se mostró bastante sorprendido por el nivel del club, que transita en el semiprofesionalismo.

"En Ucrania, un club de cuarta división no tiene el nivel del Poissy ni de lejos", constató el futbolista, quien dice admirar a jugadores como Zidane e Iniesta.

Para el guardameta Yaroslav Vazhynskyi, también procedente de la cantera del Shakhtar, la situación personal es tensa:

"Yo tengo a mi mujer e hijo en el país y eso los echo mucho de menos. Sólo cuando entro en el campo lo olvido todo", recalcó el cancerbero de 28 años.

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El AS Poissy, un club de la cuarta división francesa, ha puesto en marcha una inédita iniciativa en ese país: rescatar de la guerra a futbolistas profesionales de la Liga ucraniana, hasta el momento seis.

Todos ellos proceden del club de segunda división FC Alians, con sede en la ciudad de Sumy, en el noreste del país y una de las primeras en ser asediadas por las tropas rusas. También, hace tres semanas viajó con destino a Poissy su entrenador, Youri Yaroshenko, de 61 años y exfutbolista profesional del FC Zoryá Luhansk.

"Casi no dormimos desde que comenzó la guerra, ahora moralmente y psicológicamente estamos mejor, aunque la cabeza siga estando en Ucrania", dijo el técnico durante un entrenamiento celebrado en la sede de su nuevo club, en Poissy, una ciudad de la periferia de París.

Con ayuda de un intérprete, Yaroshenko observa el entrenamiento en el centro deportivo de la entidad sin dar indicaciones. El veterano entrenador no ejerce como tal, pues el club ya tiene a su técnico principal, Walid Aichour. Aunque el preparador ucraniano es una ayuda para la adaptación de sus compatriotas.

"Si la guerra se prolonga mucho nos quedaremos aquí, aunque esperamos que se acabe rápidamente… Lo que ocurre allí está siendo una tragedia", dijo Yaroshenko, quien agradeció la hospitalidad y el empeño del presidente del club Poissy, Olivier Szewczuk.

Ucraniano por el lado paterno, Szewczuk gastó varios miles de euros de su bolsillo para traer a los jugadores y el entrenador desde Turquía, país en el que estaban haciendo la pretemporada cuando estalló la guerra el pasado 24 de febrero.

Foto: EFE

AYUDA LEGAL Y SOCIAL

"No podíamos traer a veinte, al final se quedó en seis. El resto de la plantilla está en diferentes lugares", contó el dirigente, dueño de un pequeño negocio y que ha contado con la contribución financiera de otras empresa para su iniciativa. Se ha implicado también en encontrar alojamiento a los futbolistas y ayudarlos con la parte burocrática para legalizarlos.

Sin embargo, Szewczuk se inquieta por la demora en el tratamiento de los documentos y, sobre todo, porque aún no puedan debutar al carecer de la ficha profesional homologada.

"No sé cuánto tiempo van a aguantar así, esta gente es profesional y entrena para jugar. Un francés que jugaba en Ucrania tiene la ficha automática para regresar, pero un ucraniano que viene aquí, no", lamentó.

El ucraniano más talentoso de los seis jugadores reclutados por el Poissy se llama Kostyantyn Yaroshenko, y se formó en el Shakhtar Donestk e internacional ucraniano sub-21.

"Cuando entrenamos nos olvidamos de lo que está sucediendo allí, aunque sólo sea por media hora", dijo Yaroshenko al poco tiempo de terminar el entrenamiento de este jueves.

El habilidoso medio, de 35 años e hijo del entrenador Youri, dijo estar adaptándose bien al Poissy y se mostró bastante sorprendido por el nivel del club, que transita en el semiprofesionalismo.

"En Ucrania, un club de cuarta división no tiene el nivel del Poissy ni de lejos", constató el futbolista, quien dice admirar a jugadores como Zidane e Iniesta.

Para el guardameta Yaroslav Vazhynskyi, también procedente de la cantera del Shakhtar, la situación personal es tensa:

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