Bitso quiere masificar el uso de las criptomonedas en este año a través de la incorporación del servicio de envío de transferencias internacionales y de reforzar su plataforma para que empresas de cualquier sector puedan ofrecer pagos o productos con este tipo de activos.
“La confianza y la transparencia jugarán un papel clave para lograr masificar la adopción de las criptomonedas”, aseguró Bárbara González Briseño, directora general de Bitso México.
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La plataforma mexicana de compra y venta de criptomonedas nació en 2014 y al poco tiempo se convirtió en el primer unicornio de Latinoamérica, tal como se le conoce a las empresas de reciente creación y que logran un valor de mil millones de dólares en el corto tiempo.
Al día de hoy, la compañía cuenta con siete millones de usuarios a nivel global y pese a la ola de desconfianza que sacudió a la industria cripto desde el año pasado, más del 95 por ciento de sus clientes mantuvieron sus fondos y balance promedio en el último semestre.
Sobre este último punto la directiva destacó que tan solo con la quiebra de la plataforma FTX en 2022, Bitso registró una caída de aproximadamente 20 por ciento en su volumen de operaciones.
Sin embargo, al día de hoy están a un cinco por ciento de recuperar sus rangos previos a esta crisis. La compañía también ha establecido mesas de trabajo con las autoridades financieras mexicanas para tener una regulación con todos los participantes del sector.
Según González, recientemente sostuvieron pláticas con directivos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Banco de México (Banxico), al igual que con la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y la Unidad de Banca, Valores y Ahorro (UBVA) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
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La directiva agregó que al ser una plataforma meramente digital, cuentan con diversos mecanismos que les han permitido detectar intentos de fraude o lavado de dinero con criptomonedas.
“No queremos crear un marco regulatorio que se vuelva obsoleto muy rápido, tiene que ser dinámico. Algo importante que debería tener es la protección a usuarios, asegurarnos que haya supervisión sobre cómo manejamos los fondos, entre otros procesos”, subrayó la directora.