Los ingresos del gobierno federal registraron una contracción de 2.3 por ciento entre enero y agosto respecto al mismo periodo del año pasado, según informó la Secretaría de Hacienda.
Esta disminución se debió principalmente a una desplome de 38 por ciento en los ingresos petroleros.
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Esta contracción se debió a la caída en la demanda de hidrocarburos como consecuencia del confinamiento global, según explicó la dependencia en el reporte de Finanzas públicas y deuda pública a agosto de 2020.
Los ingresos tributarios, en tanto, tuvieron una disminución de 0.5 por ciento en el acumulado de los primeros ocho meses del año.
Destaca una caída de 15.9 por ciento en los impuestos a las importaciones, esto ante una menor demanda de bienes del extranjero.
La recaudación del IEPS y el IVA disminuyó 5.2 y 1.8 por ciento, respectivamente, con relación al periodo enero-agosto de 2019.
El reporte señala que la deuda externa aumentó ocho mil 746 millones de dólares en los primeros ocho meses del año respecto al cierre de 2019, para ubicarse en 108 mil 115.9 millones de dólares.
La deuda interna creció 138 mil 572.3 millones de pesos, y se ubicó al cierre de agosto en 6.8 billones de pesos.
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