Entre música, comedia y un poco de drama se desarrolla Forever Young, una historia donde la vejez y los recuerdos son el ingrediente principal.
Con música que va desde Selena, Café Tacvba y Aleks Syntek hasta Nirvana y Madonna, el musical Forever Young se desarrolla en una casa de retiro para actores en el año 2050, donde la mayoría de los artistas contemporáneos han muerto y la juventud y los tiempos de gloria son solo un recuerdo.
“Somos seis actores-músicos. Nos acompaña una enfermera con la que hacemos nuestros ejercicios, nos da la pastilla, nos cuida, pero también nos bulea un poco. Cuando ella se va nosotros empezamos a rememorar nuestra juventud cantando, bailando y recitando obras”, explica Federico Di Lorenzo, actor y productor del montaje.
El musical navega entre la comedia y el drama donde uno de los puntos esenciales es promover el respeto a los adultos mayores. “Queremos reivindicar la vejez, pero a través de la risa. Obviamente hay drama, momentos fuertes, pero siempre volteándolo con el remedio infalible que es reír, que la gente no se amargue”, comenta María Filippini.
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