Fuegos artificiales y pelotas gigantes que rebotaban entre el público adornaron la interpretación de "Higher power" y "Adventure of a lifetime", temas que arrancaron con el despliegue de luces y colores que fue la primera de cuatro presentaciones en CDMX del tour "Music of the spheres" de Coldplay.
"Bienvenidos todos", dijo Chris Martin, el vocalista, quien ya se dirigía al piano para tocar "Paradise". El cantante no daba tregua a las 65 mil personas que se dieron cita en el recinto, y antes de iniciar "Charlie Brown", advirtió que debían saltar durante los coros de la canción, recomendación que todos acataron.
Presumiendo su español, el cantante se dirigió a los presentes, para invitarlos a cantar "The scientist". Al ser un espectáculo en vivo no estuvo exento de imprevistos, pues la introducción de "Viva la Vida" fue interrumpida por una falla del micrófono, que rápidamente fue corregida, pero obligándolos a reiniciar la canción.
El show era demasiado bueno como para verlo a medias, por lo que quienes iban acompañados de niños, los subían a sus hombros para que no perdieran detalle alguno. Chris por su parte se divertía como esos infantes que lo veían desde las alturas, y no dejaba de reír y hacer bromas cada que se cruzaba con alguno de sus compañeros.
El show continuó con "Hymn for the weekend", "Let somebody go", "In my place" y "Yellow". Antes de finalizar esta última, el británico alcanzó a leer el letrero de una fan que le pedía dedicar esa canción a su papá. De inmediato cantó un fragmento para él, e incluso pidió a los demás que su alguien tenía una dedicatoria especial, levantaran sus carteles para que los pudiera ver.
Los saltos del público hicieron que el sueño vibrara al ritmo de "People of the pride". De pronto, el escenario se transformó en una especie de antro espacial, y todos los integrantes se colocaron unas máscaras de extraterrestres para interpretar "Something just like this" y "Midnight", mientras luces neón brillaban en el pulso y en las pantallas.
Coldplay quería sentir los corazones de la gente, por lo que hicieron una breve pausa antes de "Sky full of stars", para pedir a la gente que guardara sus celulares, y disfrutaran los siguientes cuatro minutos sin la compañía de ningún aparato electrónico.
Al finalizar la canción, una pequeña subió con ellos, y entre lágrimas se paró junto a Martín, quien se agachó para abrazarla y desearle feliz cumpleaños.
Enseguida la banda descendió del escenario para llegar al final de la plataforma que adornaba el recinto, y en el camino aprovecharon para saludar a los fans que se encontraban en hasta adelante de las barricadas.
Continuaron con "Don't panic", "Fix you", "Humankind" y un pequeño cover de "Amor eterno" de Juan Gabriel, cuya letra adaptaron para mandarle su amor a los capitalinos.
"En el mundo disfrutamos lugares bellos, pero estar en este escenario es un honor y un regalo. Sus mariachis, su música, sus máscaras, la Casa de Frida Kahlo. Un cantante puede estar feliz siempre, en la Ciudad de México", cantaron.
El final de acercaba, una muppet con alas de hada se le unió para, "Biutyful", el último tema de la noche. "Gracias con todo el corazón", expresó Martin. Aunque las personas creían que la agrupación iba a regresar, pero únicamente aparecieron los créditos en las pantallas, y las luces se encendieron.