La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ofreció una disculpa pública a las familias de Alan y Héctor, los niños mazahuas que vivían en el Centro Histórico y cuyos cuerpos fueron desmembrados por integrantes del grupo delictivo de La Unión Tepito.
"Ayer estuve con los familiares de Alan y Héctor, los dos niños mazahuas del Centro. Ellos me pidieron y así lo hago públicamente, disculpas si en algún momento criminalizamos a sus hijos, ellos son víctimas, son niños, y vamos a estar trabajando muy cerca de ellos", dijo la mandataria al concluir un recorrido de supervisión por los trabajos de la Línea 2 del Cablebús.
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Añadió que el apoyo será "en primer lugar con la Fiscalía (General de Justicia) para hacer justicia y en segundo lugar para darles todo el apoyo que necesitan, tanto los familiares, sus hermanos, como la comunidad mazahua que está en esta zona de Santa María la Redonda".
Esta disculpa por parte de Sheinbaum Pardo se originó luego de que la jefa de gobierno declarara que la muerte de Alan y Héctor era un tema de drogas, por lo que los familiares señalaron que revictimizó a los dos menores de edad.
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Este viernes, familiares y conocidos que viven en la vecindad de la calle Pensador Mexicano, donde habitaban Alan y Héctor, corrieron al subsecretario de Gobierno, Arturo Medina, y a la coordinadora general de la Autoridad del Centro Histórico, Dunia Ludlow, quienes presentaban el programa Barrio Adentro, para el rescate de niñas, niños y adolescentes en el primer cuadro de la ciudad.
El argumento para no darles el acceso fue que el gobierno criminalizó y revictimizó a sus hijos, por lo que exigían una disculpa por parte de la jefa de gobierno, la cual llegó este sábado.
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