Al filo de las 22 horas de este miércoles, deacuerdo con versiones extraoficiales, se desató un motín alinterior del penal de mediana seguridad de Topo Chico, enMonterrey, Nuevo León, que originó un despliegue de elementos deseguridad locales, de la Policía Federal y hasta delEjército.
Manuel González, secretario general de Gobiernode la entidad, confirmó la muerte de tres personas, pero sereservó las identidades, hasta que los médicos forenses realicenlos exámenes correspondientes.
Minutos antes se tenía conocimiento de que uninterno, identificado éste como Francisco Javier Puente, “ElMaruchan”, presunto líder de una fracción del Cártel deNoreste, habría muerto. También se reportaban por lo menos cuatroheridos.
En el mar de información no confirmada en redessociales, familiares de internos resaltaron que hubo desde esa horavarios disparos en el penal y hasta se llegó a manejar que hubofuga de reos, pero la autoridad estatal lo desmintió.
Otra idea que trascendió fue que buena parte dela comunidad de internos se reveló al saber que habría en laspróximas horas un traslado de Topo Chico al Cereso de Apodaca, enel mismo estado de Nuevo León. Una situación similar ya se habíapresentado en febrero pasado, luego de otra riña en la queperecieron 49 reclusos.
Hasta la media noche se informabaextraoficialmente que algunos elementos de la Fuerza Civil de NuevoLeón ya se encontraba en el interior del penal, aunque no sedetallaba si la situación estaba bajo control, o no.
Todas las calles aledañas al reclusoriopermanecen cerradas.
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