/ domingo 30 de junio de 2019

A cinco años de la matanza de Tlataya, sin responsables

Las evidencias señalan que existió alteración de la escena del crimen para encubrir a los responsables

Al cumplirse cinco años de la masacre de Tlatlaya, en la que al menos 12 personas fueron privadas arbitrariamente de la vida por elementos del Ejército mexicano en el contexto de la militarización de la seguridad pública, a la fecha no hay ningún responsable rindiendo cuentas ante la justicia.

El centro de Derechos humanos Miguel Agustín Pro Juárez señala que el 30 de junio de 2014, 22 personas fueron privadas de la vida en una bodega de San Pedro Limón, municipio de Tlatlaya, Estado de México.

A pesar de que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) señaló que esto fue resultado de un enfrentamiento entre un grupo de la delincuencia y elementos del 102 Batallón de Infantería, investigaciones periodísticas y el testimonio de la sobreviviente Clara Gómez González revelaron que un número hasta ahora indeterminado entre 12 y 15- fue resultado de ejecuciones cometidas cuando los civiles ya se habían rendido.

Las evidencias señalan que existió alteración de la escena del crimen para encubrir a los responsables, además de la tortura a las sobrevivientes para que no revelaran lo que verdaderamente sucedió.

El Centro Prodh logró acreditar, además, que días antes de los hechos la unidad castrense implicada en las ejecuciones había recibido de sus mandos una orden que literalmente instruía “abatir civiles en horas de oscuridad”.

La Sedena inició una averiguación previa por los hechos. Luego de que esta indagatoria fuera consignada, en marzo de 2016 el Juzgado Sexto Militar dictó sentencia absolutoria por el delito de infracciones de deberes militares a seis de los siete militares acusados; el séptimo fue condenado solamente a un año de prisión por el delito de desobediencia.

Por su parte, la PGR inició y consignó la Averiguación Previa AP/PGR/UEITA/161/2014, en la que acusó a siete militares por el homicidio de ocho civiles y por encubrimiento, pero debido a que no ofreció pruebas contundentes para señalar la identidad individual de los soldados responsables, estos fueron liberados con las reservas de ley por el Poder Judicial de la Federación en mayo de 2016, a pesar de considerarse probado que existieron ejecuciones arbitrarias.

Clara Gómez González, quien perdió en los hechos a su hija Ericka, adolescente al momento de los mismos, el 31 de julio de 2017, logro que el Juzgado Decimocuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México ordenara a la PGR, mediante una sentencia dictada dentro del Juicio 545/2017, que realizara con debida diligencia la investigación de los hechos, agotando la cadena de mando e investigando la orden castrense que instruía a abatir delincuentes.

A pesar de esta sentencia y a pesar de los pronunciamientos a favor de la justicia en el caso por parte de organismos internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y de procedimientos especiales, como el Relator sobre Ejecuciones Extrajudiciales, a la fecha no hay un avance que se dirija al esclarecimiento de la verdad ni existe resolución alguna que sancione por homicidio a los funcionarios militares implicados en el caso.

"Así, el encubrimiento y la impunidad que privan en este emblemático caso son un mensaje negativo sobre la intervención militar en la seguridad pública en el momento en que ha entrado en operación la Guardia Nacional" señala.

Al cumplirse cinco años de la masacre de Tlatlaya, en la que al menos 12 personas fueron privadas arbitrariamente de la vida por elementos del Ejército mexicano en el contexto de la militarización de la seguridad pública, a la fecha no hay ningún responsable rindiendo cuentas ante la justicia.

El centro de Derechos humanos Miguel Agustín Pro Juárez señala que el 30 de junio de 2014, 22 personas fueron privadas de la vida en una bodega de San Pedro Limón, municipio de Tlatlaya, Estado de México.

A pesar de que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) señaló que esto fue resultado de un enfrentamiento entre un grupo de la delincuencia y elementos del 102 Batallón de Infantería, investigaciones periodísticas y el testimonio de la sobreviviente Clara Gómez González revelaron que un número hasta ahora indeterminado entre 12 y 15- fue resultado de ejecuciones cometidas cuando los civiles ya se habían rendido.

Las evidencias señalan que existió alteración de la escena del crimen para encubrir a los responsables, además de la tortura a las sobrevivientes para que no revelaran lo que verdaderamente sucedió.

El Centro Prodh logró acreditar, además, que días antes de los hechos la unidad castrense implicada en las ejecuciones había recibido de sus mandos una orden que literalmente instruía “abatir civiles en horas de oscuridad”.

La Sedena inició una averiguación previa por los hechos. Luego de que esta indagatoria fuera consignada, en marzo de 2016 el Juzgado Sexto Militar dictó sentencia absolutoria por el delito de infracciones de deberes militares a seis de los siete militares acusados; el séptimo fue condenado solamente a un año de prisión por el delito de desobediencia.

Por su parte, la PGR inició y consignó la Averiguación Previa AP/PGR/UEITA/161/2014, en la que acusó a siete militares por el homicidio de ocho civiles y por encubrimiento, pero debido a que no ofreció pruebas contundentes para señalar la identidad individual de los soldados responsables, estos fueron liberados con las reservas de ley por el Poder Judicial de la Federación en mayo de 2016, a pesar de considerarse probado que existieron ejecuciones arbitrarias.

Clara Gómez González, quien perdió en los hechos a su hija Ericka, adolescente al momento de los mismos, el 31 de julio de 2017, logro que el Juzgado Decimocuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México ordenara a la PGR, mediante una sentencia dictada dentro del Juicio 545/2017, que realizara con debida diligencia la investigación de los hechos, agotando la cadena de mando e investigando la orden castrense que instruía a abatir delincuentes.

A pesar de esta sentencia y a pesar de los pronunciamientos a favor de la justicia en el caso por parte de organismos internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y de procedimientos especiales, como el Relator sobre Ejecuciones Extrajudiciales, a la fecha no hay un avance que se dirija al esclarecimiento de la verdad ni existe resolución alguna que sancione por homicidio a los funcionarios militares implicados en el caso.

"Así, el encubrimiento y la impunidad que privan en este emblemático caso son un mensaje negativo sobre la intervención militar en la seguridad pública en el momento en que ha entrado en operación la Guardia Nacional" señala.

Mundo

Universidad de Florida expulsará a estudiantes que participen en protestas propalestinas

La notificación por parte de la institución empezó a ser distribuida a los manifestantes la tarde del jueves

Finanzas

México inicia investigación antidumping a calzado chino

La Secretaría de Economía advirtió que pondrá aranceles a todos los productos en los que encuentre alguna afectación a la industria de calzado nacional

Elecciones 2024

INE gastará un millón de pesos en renta de sedes alternas para recuento de votos

En el informe también se da cuenta que se requirió el apoyo de los cuerpos de seguridad para el resguardo de las sedes donde se realizarán los cómputos distritales

Política

Senado prohíbe y sanciona las terapias de conversión en México

Las sanciones se aplicarán a quienes realicen, obliguen o financien cualquier tipo de tratamiento, terapia o práctica que restrinja la orientación sexual

Finanzas

Utilidad de Pemex se desploma en el primer trimestre

Los factores que contribuyeron a esta variación fueron la disminución en las ventas totales y en el rendimiento en cambios, así como un incremento en el costo de ventas

Sociedad

Asesinan a hermano de candidato emecista a la alcaldía de Tetecala, Morelos

El hermano del candidato fue asesinado en la colonia El Paso. La candidata a la gubernatura por Movimiento Ciudadano, Jessica Ortega, condenó los hechos.