CHIHUAHUA.- Clara Torres, exdirectora del Programa Estancias Infantiles, dejó entrever que la cancelación del programa pudiera obedecer a revanchismos políticos. “Primero se anunció el recorte de 50 por ciento, de ahí una diputada que es de la Comisión de Infancia, que es del PAN, pidió que se restituyera el recorte, no les gustó y deciden bajarlo, allí ellos sabrán sus decisiones”, dijo.
“Andrés Manuel López Obrador es un hombre muy sensible, si tuviera la información él no hubiera tomado la decisión de cerrarlas”, agregó.
Mencionó que desde su llegada a las oficinas de Estancias Infantiles se trató de solventar los problemas que se reportaron y que eran condicionantes para su permanencia, por lo que no hay un factor cien por ciento comprensible o demostrable para el cierre del programa.
Dio a conocer que el Gobierno federal contrató a una empresa externa con el objeto de que analizara la factibilidad de los programas y el programa de estancias infantiles, salió muy bien evaluado.
“Cuando se decide evaluar el programa, me lo hacen saber, pero ya habíamos solventado los señalamientos”.
La funcionaria externó que pese al primer anuncio de recorte, de 50 por ciento “ya se habían tomado las medidas necesarias para eficientar el programa y no afectar tanto su operatividad”.
La juarense habría optado por dejar la titularidad del plan debido a la situación que no favorece al programa de trabajo.
Reportó además que los estados en los cuales se detectaron problemas en la operación atribuibles a corrupción fueron: Estado de México, Jalisco y Puebla y no fue algo generalizado, pero en el caso de Chihuahua dijo desconocer que se tuvieran problemas, dado que las cifras dadas fueron muy globales, sin consideraciones particulares. “Sí se detectaron las ilegalidades, se solventaron, se analizó que el mayor problema era que supervisores inflaban el número de niños para quedarse con el recurso, pero quien validaba los datos era la dueña de la estancia, a quien el supervisor extorsionaba previamente para firmarle a cambio de recibir apoyos”.
Desde la óptica de Torres, dichos problemas se subsanarían con su idea de darle facultades a la propietaria de validar el número de niños, ésta vez sin supervisores, acudiendo directamente a las oficinas para el registro.
Agregó que el último reporte de la auditoría practicada al problema arrojó pérdidas o malos manejos de apenas 1.8 por ciento, del recurso entregado.
Lo anterior corresponde a 30 mil niños, por los cuales se pagaban, pero no acudían a las estancias del país.
“Votamos 30 millones por él (AMLO) para que se corrija la corrupción, no para que se cancelen programas que sí sirven”, dijo Torres.
“Este programa de guardería tenía 10 años funcionando, consistía en apoyos de 950 pesos por niño a cada estancia”.
La exfuncionaria federal agregó que el Coneval había reportado que 90 por ciento de las madres aprobaban el esquema, por lo que el cierre le parece sumamente extraño e inusual.
Torres lleva 20 años en el tema de cuidado infantil, implementando los Centros de Bienestar Infantil en diversas ciudades del Estado.
Respecto a su renuncia dijo que obedece a la cancelación del programa y a la insensibilidad de ciertos funcionarios públicos que mal informaron al presidente.
“Me salgo (de la administración) porque mi especialidad es el cuidado infantil”, señaló.
Dijo que el hecho de que María Luis Albores la haya desconocido como directora, le causa ruido, debido a que pese a que su nombramiento no estaba plasmado en un documento, ella operaba por órdenes del presidente, incluso desde antes que tomara protesta.
“A mí me presentan con todos los directores como tal y me asignan oficina en el piso 19”, finalizó.
La separación de la funcionaria panista coincide tras la polémica sobre los señalamientos de corrupción que, en la pasada administración, dejó el programa y éstas vertidas por el propio presidente de la República López Obrador.
Aunque en principio se había establecido que el esquema, seguiría operando como tal, el pasado 7 de febrero el gobierno federal oficializó que los recursos serán entregados directo a papás o tutores de niños beneficiarios, lo que ha generado inconformidad.
Se prevé que próximamente haya un nuevo nombramiento para ese cargo.
Clara Torres reconoció haber sido invitada a otra área, pero señaló que desatendió dicha oferta.
