La renuncia presentada ayer por seis consejeros consultivos no afecta al funcionamiento del organismo ni a las víctimas de arbitrariedades, afirmó este martes la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
“A lo mejor, esto es lo que quisieran. Pero el que cesen las funciones, respetables e importantes, que desarrolla el Consejo Consultivo, no implica que se detenga nuestro trabajo”, aseguró la Comisión en un comunicado.
En respuesta a la salida de seis de los integrantes del Consejo Consultivo quienes denunciaron que se les obstaculizó para cumplir con sus funciones, el organismo a cargo de Rosario Piedra Ibarra negó está situación y dijo que las actas de sesiones muestran que no fue así.
En dichas actas, advirtió, también fueron plasmadas las “constantes faltas de respeto que las y los integrantes del Consejo Consultivo tenían con la presidenta, y en general en contra de todas las personas servidoras públicas que forman parte de este organismo”.
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De acuerdo con la CNDH “hay ejemplos de sobra” de que los exconsejeros desempeñaron una labor “obstruccionista” y “descalificatoria” hacia todo lo que propuesto Piedra Ibarra, mismas que, según dijo, rozaron la ilegalidad, por lo que ya fueron denunciadas.
Destacó, por otro lado, que desde el pasado 29 de septiembre, los ahora exconsejeros “se habían puesto al margen de la ley”, pues en esa fecha debieron nombrar a dos de los integrantes del Consejo para ser renovados por el Senado de la Reparación, situación que no ocurrió.
Esto fue dado a conocer por Rosario Ibarra a los legisladores para que intervinieran y pudiera hacer los respectivos nombramientos que permitieran al Consejo volver a sesionar, pero en la espera de la resolución, explicó, fue cuando los seis consejeros presentaron su renuncia.
Ayer, en su carta pública enviada a la Comisión de Derechos Humanos y a la Mesa Directiva del Senado de la República, anunciaron que su decisión fue tomada a raíz de los obstáculos interpuestos desde la presidencia de la CNDH para que desempeñaran su labor, además de ser calumniados y amenazados.
Destacaron también que tuvieron marcadas diferencias con Rosario Piedra sobre temas básicos en el funcionamiento de las sesiones del Consejo, como la definición del quórum para sesionar o el orden del día, hasta otros más complejos como la emisión de recomendaciones o posicionamientos públicos.
Al respecto, la Comisión aseguró que mienten cuando dicen que se dejaron emitir recomendaciones para no integrar las observaciones del Consejo Consultivo, así como el hecho de que hayan sido amenazados por la presidenta del organismo.
“Es completamente falso que la presidenta Rosario Piedra Ibarra haya proferido amenaza alguna en su contra, y mucho menos que haya utilizado recursos personales o de la propia Comisión para calumniarlos.
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“Por el contrario, cada vez que en pronunciamientos públicos, la CNDH se refirió a sus ahora exconsejeros, fue para aclarar manifestaciones falsas o a modo, expresiones misóginas y de odio, e incluso amenazas que ellos sí profirieron, porque hay que recordar que hubo una ocasión en que amenazaron con destituirla”, finalizó.