Andrés Manuel López Obrador dijo que desde el Gobierno no se espía y no se persigue a nadie, por lo que recordó que desde que estaba en la oposición fue espiado desde 1977, y que eso da constancia en los expedientes antiguos de la Dirección Federal de Seguridad (DFS), firmados por José Nazar Haro.
Comentó que el CISEN ha dejado de hacer espionaje y escuchar conversaciones, “nosotros no hemos comprado equipos para escuchar”, ya que había corrupción en la compra de estos a empresas.
En el Salón Tesorería del Palacio Nacional, el presidente aseveró qué hay equipos que están sin usar y que se compraron en el gobierno anterior, pero “no los usamos por principios”.
Manifestó que en la época conservadora se llegó a espiar y hasta propiciar desapariciones y masacres, por lo que dijo que aún con la actual CNDH, no se tiene una queja por violación a los derechos humanos.
En su conferencia de prensa mañanera, López Obrador expuso que se habrá de hacer una investigación sobre el uso del programa Pegasus, ya que se denunció que aún se sigue utilizando.
Dijo que se ha protegido a todas y todos los que han sido víctimas de espionaje, al tiempo de señalar que desapareció el Estado Mayor Presidencial (EMP), por lo que recordó que en la represión estudiantil de 1968 participó este cuerpo militar.
En ese sentido, el Primer Mandatario abundó que el EMP era un aparato de élite que cuidaban al presidente ocho mil elementos, por lo que en el 2018 se ejercieron tres mil 600 millones de pesos en su presupuesto.
“Era un aparato costosísimo. Los elementos del EMP regresaron a la Sedena y hoy forma parte de la Guardia Nacional”.
Enfatizó que su Gobierno está construyendo una auténtica democracia, no una dictadura, por lo que se garantiza el derecho a disentir. “Vivimos un momento estelar, hay que verle el lado bueno. Lo viejo no alcanza a morir y lo nuevo no alcanza todavía a nacer”.
“Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”.