Por cada divorcio que se registra en Nuevo León sólo existen 1.5 nuevos matrimonios, esto, cuando el promedio entre los estados es de 4.4. Del lado opuesto destacan Oaxaca y Chiapas, donde la relación es de 12.4 y 8.5, respectivamente. En ambos estados persisten sistemas de usos y costumbres muy arraigados en las comunidades, así como altos niveles de pobreza y baja escolaridad.