TUXTLA GUTIÉRREZ. Indígenas desplazados en Chiapas enfrentan una serie de discriminación. Tras años de lucha aún siguen en espera de la luz de la justicia; demandan al Estado mexicano detener a grupos civiles armados y a generar condiciones para su retorno digno o reubicación segura y ordenada, señaló el director del Centro de Derechos Humanos Ku’untik, Diego Cadenas Gordillo.
Enfrentan frío, escasez de alimentos, inseguridad, desprecio de las instituciones, rechazo de la sociedad; se les niega el derecho a la salud a las mujeres, acceso al empleo y el derecho a la educación de 146 niños en el exilio; sólo han tenido la solidaridad de estudiantes de la Escuela Normal Rural Mactumactzá, enfatizó Cadenas Gordillo.
Los indígenas desplazados del del ejido Cintalapa, del municipio de Ocosingo, salieron de sus hogares el 6 de marzo de 2009; las familias de Tenango en Ocosingo fueron expulsadas el 23 de enero de 2015; las familias del paraje Sulvó en Zinacantán salieron el 19 de diciembre de 2015, y del ejido Puebla en Chenalhó salieron desde el 26 de mayo de 2016.
Otro grupo de más de 80 indígenas, que no forman parte de este colectivo, integrado por 22 familias del Chigtón, municipio de Ixtapa, fue expulsado el 30 de agosto de 2012; viven exiliados en el fraccionamiento Residencial Montebello en, Chiapa de Corzo, donde viven con escasez de alimentos y sin empleo, aseguraron su representante Agustín Pérez Gómez y su abogado David Ramos Hernández.
El indígena Armando Méndez Núñez, representante de los desplazados del ejido Cintalapa, municipio de Ocosingo, dijo que son 10 que han sobrevivido fuera de sus hogares tras la incursión violenta de sus agresores en marzo de 2009, por negarse a realizar trabajo político a favor del Partido Verde Ecologista de México.
“Necesitamos alimento, justicia y el retorno a nuestras comunidades de donde nos obligaron a salir y a donde los gobiernos no nos han podido regresar. Necesitamos que detengan a los grupos civiles armados que siguen operando en contra de todos los grupos de desplazados”, ese es el clamor, dijo Eva Méndez, desplazada de esa comunidad.
Mientras tanto, Araceli Cruz, representante de los desplazados del ejido Puebla, expuso que el mayor agobio que enfrentan es la escasez de alimentos debido a que la secretaría de Protección Civil suspendió la entrega con el argumento de que la secretaría de Hacienda no le ha otorgado recursos económicos.