Tras 9 años desaparecido, la Fiscalía General de la República (FGR) confirmó que los restos óseos encontrados hace más de un año en una fosa clandestina en el norte de Sinaloa pertenecen a Roberto Corrales Medina, hijo de Mirna Medina, líder de las Rastreadoras de El Fuerte.
Te podría interesar: Sinaloa podría tener hasta 600 fosas clandestinas: más de 400 fueron encontradas
De acuerdo con la información, la activista Mirna Medina fue convocada el pasado lunes 4 de diciembre a la FGR donde un agente federal le entregó los resultados de las muestras genéticas correspondientes a los restos óseos localizados el pasado 5 de octubre de 2022 en una zona boscosa de Ocolome, El Fuerte, durante una búsqueda federal.
Los estudios arrojaron una coincidencia del 99.9 con Roberto, quien fue privado de su libertad el 14 de julio de 2014. Tres años después de su desaparición encontraron parte de sus restos, los cuales fueron velados y sepultados en Mochicahui, El Fuerte.
Roberto Corrales Medina fue secuestrado cuando tenía 21 años y trabajaba en una gasolinera en El Fuerte, vendiendo discos y memorias USB. A partir de ese momento, su madre, Mirna Medina, abandonó las aulas donde impartía clases para emprender su búsqueda.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
La autoridad, en respuesta a su reclamo, mostró indiferencia al afirmar que no se dedicaban a buscar cuerpos.
