“No es una calificación de nosotros lo que importa. Lo que importa es cómo lo ve el país y yo creo que es muy claro: el índice de confianza del consumidor más grande de la historia y el porcentaje de aprobación más alto de cualquier presidente, yo creo que ahí está la respuesta”, dijo el director de Citibanamex, ERNESTO TORRES CANTÚ, cuando le preguntaron por los primeros 100 días de Andrés Manuel López Obrador al frente del país.
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Dicen los que saben que Gerardo Sosa Castelán está en el ojo del huracán. En los últimos meses ha tenido que enfrentar diferentes asuntos que de alguna u otra forma le han pegado a él y a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), de cuyo patronato es presidente. Lo más reciente es que muchos dedos apuntan a esa casa de estudios, luego de que la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda diera a conocer que implementó acciones de prevención y detección de lavado de dinero en contra de una Universidad pública estatal.
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Aunque las autoridades hacendarias no dieron a conocer el nombre de la escuela para no entorpecer el caso, se presume que es la UAEH la que recibió las transferencias de más de una veintena de países, hasta por 150 millones de dólares en una sola triangulación.
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Otro de los escándalos en que se vio involucrado Gerardo Sosa, junto con la UAEH ocurrió en junio del año pasado, cuando la coordinadora de Administración y Finanzas de la Universidad, Gabriela Mejía, fue detenida y a raíz de ello se descubrió que trasladaba 1.4 millones de pesos en efectivo. Al respecto, Sosa Castelán y las autoridades universitarias hidalguenses dijeron que ese dinero era para pagar la nómina de los albañiles que trabajaban en la edificación de una residencia estudiantil en el municipio de Tulancingo. Muy pronto se sabrá si es la UAEH la casa de estudios a la que le congelaron cuentas bancarias, pues podrían comenzar a brotar las dificultades financieras para su funcionamiento. Acuérdese, aquí lo leyó primero, aquí salió de las sombras...
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Ayer le comentábamos del inminente emplazamiento a huelga de los centros públicos de educación superior en el país, porque les redujeron 80 millones de su presupuesto anual. Las cosas continúan mal, pero se van a poner peor. Circulan indicios, versiones y hasta grabaciones, que prueban que los representantes sindicales de esos grupos no son unos santos. Y ya comenzaron a hacer ruido.
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Por ejemplo, ya salió de las sombras un audio del ex secretario general del sindicato de trabajadores académicos y administrativos del Colegio de Bachilleres en Chihuahua, José Acuña Peralta, en el que se escucha pedir 20 mil pesos mensuales por ser consejero vitalicio del sindicato. El recurso para pagarle su cuota vitalicia saldría justamente del presupuesto asignado a la institución. Este tipo de fugas de recursos se dan en todo el país, lo que hace que los Cobach, Cecyts y Conaleps tampoco sean garantía de probidad en el manejo de recursos. Lo que es un hecho es que en esta telenovela de la huelga, las partes se están dando hasta con la cubeta…
