/ lunes 6 de mayo de 2024

Cuauhtémoc Cárdenas

A sus 90 años, el Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas nos sigue invitando a la reflexión crítica y constructiva sobre nuestra democracia, nuestro modelo de organización, de producción y crecimiento, sobre nuestra relación con la naturaleza desde la multiculturalidad siempre con justicia, inclusión y paz.

En su libro “Por una democracia progresista. Debatir el presente para un mejor futuro”, recoge algunas de las etapas del fortalecimiento de un Estado aún en búsqueda de democracia frente a las tentaciones y (re)caídas autoritarias o personalistas de gobernar. Recoge los aciertos y desvíos de una Revolución Mexicana “indetenible” pero aún en camino rumbo a un modelo institucional más democrático para un país más igualitario, fraterno y justo. Aprendiendo de la historia, para no repetir sus errores, propone recuperar un Proyecto de Nación entendiendo el presente con responsabilidad para un futuro más progresista a la luz de exigencias y debates fundamentales del siglo XXI, como la legalización de las drogas, al ambientalismo, la igualdad de género, el papel de las juventudes o incluso una nueva Constitución para México.

Rompió las dinámicas de un partido nacional autoritario, recorrió varias veces todo el país, gobernó con democracia, ética y vanguardia en territorios complejos, exigió justicia contra el despojo a las comunidades indígenas. Fue el primer Jefe de Gobierno del Distrito Federal, encabezando la lucha por una Ciudad democrática fuera del yugo impuesto por la presidencia absoluta. Apoyó a poblaciones refugiadas de las dictaduras, dialogó y construyó con el movimiento del 68, impulsó una justicia autónoma garantista de derechos y libertades. Promueve la reforma fiscal justa, el medioambiente al centro del desarrollo planificado, defiende las culturas, el campo y ha sido articulador de varios movimientos populares, como el Frente Democrático Nacional que lo propulsó como candidato a la presidencia.

En un homenaje en el Colegio de San Ildefonso, sus cercanos recordaron algunos elementos de la amplia y diversa trayectoria de un hombre que hizo historia cuyo papel fue determinante para la democracia y los territorios. Privilegiando la conversación a la confrontación, el Ingeniero logró sumar las causas para repensar a México por la vía democrática, siempre junto con las juventudes. Su liderazgo con humildad deja un legado colectivo que tenemos la responsabilidad de recordar, contar y tomar en cuenta hoy en la lucha por el México democrático.

Ha sido un honor aprender y participar con el Ingeniero en el movimiento “Por México Hoy” desde 2015 con el apoyo de organizaciones sociales, sindicales y feministas, en el proceso de elaboración de la Constitución de la Ciudad de México o en la vinculación internacional de la Ciudad y demás reflexiones gracias a su Fundación para la Democracia. ¡Que sean muchas más acciones inspiradoras! Mi profundo agradecimiento y reconocimiento al “Inge”, Cuauhtémoc Cárdenas, un referente internacional, rebelde con causas e inteligencia que incide, líder democrático abierto que frente al conflicto construye en vez de destruir, como bien dice Félix Gamundi, líder histórico del 68: “un luchador incansable e indoblegable; un relámpago en la oscuridad” de las derivas autoritarias y antidemocráticas.

A sus 90 años, el Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas nos sigue invitando a la reflexión crítica y constructiva sobre nuestra democracia, nuestro modelo de organización, de producción y crecimiento, sobre nuestra relación con la naturaleza desde la multiculturalidad siempre con justicia, inclusión y paz.

En su libro “Por una democracia progresista. Debatir el presente para un mejor futuro”, recoge algunas de las etapas del fortalecimiento de un Estado aún en búsqueda de democracia frente a las tentaciones y (re)caídas autoritarias o personalistas de gobernar. Recoge los aciertos y desvíos de una Revolución Mexicana “indetenible” pero aún en camino rumbo a un modelo institucional más democrático para un país más igualitario, fraterno y justo. Aprendiendo de la historia, para no repetir sus errores, propone recuperar un Proyecto de Nación entendiendo el presente con responsabilidad para un futuro más progresista a la luz de exigencias y debates fundamentales del siglo XXI, como la legalización de las drogas, al ambientalismo, la igualdad de género, el papel de las juventudes o incluso una nueva Constitución para México.

Rompió las dinámicas de un partido nacional autoritario, recorrió varias veces todo el país, gobernó con democracia, ética y vanguardia en territorios complejos, exigió justicia contra el despojo a las comunidades indígenas. Fue el primer Jefe de Gobierno del Distrito Federal, encabezando la lucha por una Ciudad democrática fuera del yugo impuesto por la presidencia absoluta. Apoyó a poblaciones refugiadas de las dictaduras, dialogó y construyó con el movimiento del 68, impulsó una justicia autónoma garantista de derechos y libertades. Promueve la reforma fiscal justa, el medioambiente al centro del desarrollo planificado, defiende las culturas, el campo y ha sido articulador de varios movimientos populares, como el Frente Democrático Nacional que lo propulsó como candidato a la presidencia.

En un homenaje en el Colegio de San Ildefonso, sus cercanos recordaron algunos elementos de la amplia y diversa trayectoria de un hombre que hizo historia cuyo papel fue determinante para la democracia y los territorios. Privilegiando la conversación a la confrontación, el Ingeniero logró sumar las causas para repensar a México por la vía democrática, siempre junto con las juventudes. Su liderazgo con humildad deja un legado colectivo que tenemos la responsabilidad de recordar, contar y tomar en cuenta hoy en la lucha por el México democrático.

Ha sido un honor aprender y participar con el Ingeniero en el movimiento “Por México Hoy” desde 2015 con el apoyo de organizaciones sociales, sindicales y feministas, en el proceso de elaboración de la Constitución de la Ciudad de México o en la vinculación internacional de la Ciudad y demás reflexiones gracias a su Fundación para la Democracia. ¡Que sean muchas más acciones inspiradoras! Mi profundo agradecimiento y reconocimiento al “Inge”, Cuauhtémoc Cárdenas, un referente internacional, rebelde con causas e inteligencia que incide, líder democrático abierto que frente al conflicto construye en vez de destruir, como bien dice Félix Gamundi, líder histórico del 68: “un luchador incansable e indoblegable; un relámpago en la oscuridad” de las derivas autoritarias y antidemocráticas.