/ viernes 8 de febrero de 2019

Hacia la conservación, aprovechamiento y desarrollo sostenible: CIIDZA

Desde el año 2017, el Sistema de Centros Públicos de Investigación (CPI’s) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) impulsó el modelo de Consorcios con el fin de “aplicar sus capacidades científicas y tecnológicas para resolver problemas y generar innovaciones en favor de diversos sectores sociales y económicos de las diferentes regiones del País”.

Uno de los objetivos principales de estas entidades es hacer más efectivo el aparato científico y tecnológico del país, ya que al integrarse como Consorcio dos o más CPI’s pueden aprovechar la infraestructura y los recursos humanos de sus integrantes. Un dato interesante es que los Consorcios además de desarrollar ciencia básica y contribuir a la formación de recursos humanos de alto nivel, pretenden generar una intensa relación con los sectores gubernamental y privado para, de manera conjunta, desarrollar soluciones técnicas y científicas reales.

Actualmente, se encuentran en etapa de operación, al menos, 14 Consorcios; entre ellos se encuentra el Consorcio de Investigación, Innovación y Desarrollo para las Zonas Áridas (CIIDZA), el cual está conformado por seis CPI’s: el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste S. C. (Cibnor), el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA), El Colegio de San Luis (Colsan), y el Instituto Potosino de Investigación Científico y Tecnológica (Ipicyt), siendo éste último su sede en San Luis Potosí.

Foto: Especial

El Consorcio CIIDZA inició operaciones en junio de 2018 y tiene como misión “la conservación y aprovechamiento sostenible de la diversidad biológica y cultural de las zonas áridas, por medio de la investigación y la formación de recursos humanos con un enfoque transdisciplinario, participativo e innovador, para atender las necesidades de bienestar y desarrollo de la sociedad”.

Sus objetivos estratégicos son: i) desarrollar proyectos transdisciplinarios de investigación científica y tecnológica orientados a la conservación, aprovechamiento y desarrollo sostenible de las zonas áridas con la participación de las instituciones que conforman el consorcio; ii) buscar y fortalecer las relaciones multisectoriales para conocer las problemáticas reales, influir en las políticas públicas y convertirnos en el referente nacional de las zonas áridas, y iii) alcanzar la autosuficiencia financiera del consorcio a través de recursos económicos obtenidos por concurso, propiedad intelectual y prestación de servicios especializados.

La visión del CIIDZA en el periodo 2018-2023 se definió de esta manera: “ser un Consorcio funcional, transdisciplinario, socialmente útil y consolidado que incide en la conservación, aprovechamiento y desarrollo sostenible de las zonas áridas”.

A nivel mundial, las tierras áridas ocupan 41% de la superficie terrestre del planeta y son el hogar de más de 2,000 millones de personas, es decir, un tercio de la población humana. En México, el altiplano árido abarca el 49% del territorio nacional, ocupando 101 millones de hectáreas, las cuales se distribuyen en 19 entidades de la República que incluyen a 690 municipios, y en él se encuentra 30% de la población mexicana. Estas regiones se caracterizan por una escasez de agua, con una distribución de la precipitación pluvial altamente errática y de tipo torrencial, situación que limita sustancialmente el desarrollo de las actividades agropecuarias.

Foto: Especial

Actualmente, el CIIDZA posee cuatro ejes principales de investigación científica básica: i) química farmacéutica de productos naturales, ii) biotecnología y ecología química, iii) desarrollo de alimentos funcionales y nutracéuticos, y iv) aprovechamiento sostenible de la diversidad biológica y cultural de las zonas áridas.

Asimismo, otras líneas de investigación relacionadas también son incluidas en el desarrollo de proyectos diversos que pretenden abordar las principales problemáticas de éstas zonas y generar un impacto socioeconómico positivo en la región.

Además del quehacer científico del Consorcio, las acciones que el CIIDZA está desarrollando para cumplir con sus objetivos estratégicos están: i) el desarrollo de un catálogo de plantas de zonas áridas y semiáridas con importancia farmacéutica, cosmética y alimenticia, ii) la firma de convenios de colaboración con instituciones, entidades gubernamentales y empresas, y iii) un estudio de mercado para el diagnóstico de problemáticas del sector privado en la región.

Mayor información

Sitio web de Consorcios Conacyt: https://www.conacyt.gob.mx/index.php/consorcios

Sitio web de CIIDZA: https://ciidza.ipicyt.edu.mx/

La importancia de conservación y manejo de los recursos bióticos del Desierto Chihuahuense: https://www.elsoldemexico.com.mx/analisis/la-importancia-de-conservacion-y-manejo-de-los-recursos-bioticos-del-desierto-chihuahuense-2969755.html

Autor

Abraham Escobedo Moratilla es doctor en Biología Molecular y gerente del Consorcio de Investigación e Innovación en Zonas Áridas (CIIDZA), miembro del SNI, Nivel 1, y se encuentra adscrito al Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (Ipicyt). Contacto: abraham.escobedo@ipicyt.edu.mx

***

El blog México es ciencia está en Facebook y Twitter. ¡Síganos!

Desde el año 2017, el Sistema de Centros Públicos de Investigación (CPI’s) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) impulsó el modelo de Consorcios con el fin de “aplicar sus capacidades científicas y tecnológicas para resolver problemas y generar innovaciones en favor de diversos sectores sociales y económicos de las diferentes regiones del País”.

Uno de los objetivos principales de estas entidades es hacer más efectivo el aparato científico y tecnológico del país, ya que al integrarse como Consorcio dos o más CPI’s pueden aprovechar la infraestructura y los recursos humanos de sus integrantes. Un dato interesante es que los Consorcios además de desarrollar ciencia básica y contribuir a la formación de recursos humanos de alto nivel, pretenden generar una intensa relación con los sectores gubernamental y privado para, de manera conjunta, desarrollar soluciones técnicas y científicas reales.

Actualmente, se encuentran en etapa de operación, al menos, 14 Consorcios; entre ellos se encuentra el Consorcio de Investigación, Innovación y Desarrollo para las Zonas Áridas (CIIDZA), el cual está conformado por seis CPI’s: el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste S. C. (Cibnor), el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA), El Colegio de San Luis (Colsan), y el Instituto Potosino de Investigación Científico y Tecnológica (Ipicyt), siendo éste último su sede en San Luis Potosí.

Foto: Especial

El Consorcio CIIDZA inició operaciones en junio de 2018 y tiene como misión “la conservación y aprovechamiento sostenible de la diversidad biológica y cultural de las zonas áridas, por medio de la investigación y la formación de recursos humanos con un enfoque transdisciplinario, participativo e innovador, para atender las necesidades de bienestar y desarrollo de la sociedad”.

Sus objetivos estratégicos son: i) desarrollar proyectos transdisciplinarios de investigación científica y tecnológica orientados a la conservación, aprovechamiento y desarrollo sostenible de las zonas áridas con la participación de las instituciones que conforman el consorcio; ii) buscar y fortalecer las relaciones multisectoriales para conocer las problemáticas reales, influir en las políticas públicas y convertirnos en el referente nacional de las zonas áridas, y iii) alcanzar la autosuficiencia financiera del consorcio a través de recursos económicos obtenidos por concurso, propiedad intelectual y prestación de servicios especializados.

La visión del CIIDZA en el periodo 2018-2023 se definió de esta manera: “ser un Consorcio funcional, transdisciplinario, socialmente útil y consolidado que incide en la conservación, aprovechamiento y desarrollo sostenible de las zonas áridas”.

A nivel mundial, las tierras áridas ocupan 41% de la superficie terrestre del planeta y son el hogar de más de 2,000 millones de personas, es decir, un tercio de la población humana. En México, el altiplano árido abarca el 49% del territorio nacional, ocupando 101 millones de hectáreas, las cuales se distribuyen en 19 entidades de la República que incluyen a 690 municipios, y en él se encuentra 30% de la población mexicana. Estas regiones se caracterizan por una escasez de agua, con una distribución de la precipitación pluvial altamente errática y de tipo torrencial, situación que limita sustancialmente el desarrollo de las actividades agropecuarias.

Foto: Especial

Actualmente, el CIIDZA posee cuatro ejes principales de investigación científica básica: i) química farmacéutica de productos naturales, ii) biotecnología y ecología química, iii) desarrollo de alimentos funcionales y nutracéuticos, y iv) aprovechamiento sostenible de la diversidad biológica y cultural de las zonas áridas.

Asimismo, otras líneas de investigación relacionadas también son incluidas en el desarrollo de proyectos diversos que pretenden abordar las principales problemáticas de éstas zonas y generar un impacto socioeconómico positivo en la región.

Además del quehacer científico del Consorcio, las acciones que el CIIDZA está desarrollando para cumplir con sus objetivos estratégicos están: i) el desarrollo de un catálogo de plantas de zonas áridas y semiáridas con importancia farmacéutica, cosmética y alimenticia, ii) la firma de convenios de colaboración con instituciones, entidades gubernamentales y empresas, y iii) un estudio de mercado para el diagnóstico de problemáticas del sector privado en la región.

Mayor información

Sitio web de Consorcios Conacyt: https://www.conacyt.gob.mx/index.php/consorcios

Sitio web de CIIDZA: https://ciidza.ipicyt.edu.mx/

La importancia de conservación y manejo de los recursos bióticos del Desierto Chihuahuense: https://www.elsoldemexico.com.mx/analisis/la-importancia-de-conservacion-y-manejo-de-los-recursos-bioticos-del-desierto-chihuahuense-2969755.html

Autor

Abraham Escobedo Moratilla es doctor en Biología Molecular y gerente del Consorcio de Investigación e Innovación en Zonas Áridas (CIIDZA), miembro del SNI, Nivel 1, y se encuentra adscrito al Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (Ipicyt). Contacto: abraham.escobedo@ipicyt.edu.mx

***

El blog México es ciencia está en Facebook y Twitter. ¡Síganos!