En las elecciones de 2018 en la CDMX el actual Presidente Andrés Manuel López Obrador obtuvo más de 400 mil votos que Claudia Sheinbaum, que era la candidata a la jefatura de gobierno de la CDMX. Ese ejemplo es muy claro para mostrar lo que es el voto diferenciado. Algunos electores no apoyan en cascada, su comportamiento político varía y en un mismo territorio eligen por diferentes personajes; que en el mejor de los casos es una manera de fortalecer una democracia con contrapesos.
El próximo domingo dos de junio algunos votantes no tacharán una sola fuerza política en todas sus boletas. No todos los que elijan a Claudia Sheinbaum, a la presidencia de la República, apoyarán a Clara Brugada o al candidato a alcalde por ese partido. Un análisis cuantitativo, vislumbra que en caso de que la capital del país sea pérdida por Morena; podría explicarse por el voto diferenciado.
En la capital del país, este comportamiento electoral podría explicarse debido a que en la elección interna, la derrota de Omar García Harfush resultó ser una guerra pírrica, y por eso el nulo apoyo a la candidatura de Clara Brugada. Además de la falta de empatía con otro tipo de electorado más allá de las bases de Morena. O tal vez por que recuerdan que en 2009 representó a la primera “Juanita” en Iztapalapa, ya que llegó a su cargo como jefa delegacional, tras una polémica en la que estuvo implicado López Obrador, Marcelo Ebrard y Rafael Acosta Ángeles “Juanito”, quien fue el candidato ganador y por “motivos de salud” delegó el cargo a Brugada.
Por otra parte, se prevé que los resultados electorales mostrarán el voto duro de cada partido en el país. Por ejemplo, con la información de diferentes casas encuestadoras, estos serían los resultados hoy con una participación de entre 60 y 65 por ciento. De los 98 millones de electores participarán 62 millones con los siguientes resultados: Morena (28 millones), PAN, PRI, PRD (20 millones), Movimiento Ciudadano (ocho millones), PVEM (tres millones) y PT (tres millones).
Algunas conclusiones son que es probable que Claudia Sheinbaum supere los 30 millones que obtuvo López Obrador en 2018, con la suma del PVEM y PT, la oposición tendrá más votos que hace seis años y logrará una importante presencia en el Congreso, y los naranjas al menos conservarán su presencia en ciudades claves del país; y se potencializan como un fuerza importante que suma más que el PVEM y el PT. También habrá conflictos electorales, ya que, de acuerdo con la última intervención de Claudia Sheinbaum en el reciente debate, litigarán “fraudes electorales”. Algunos estados serán la CDMX y Veracruz.
La diferencia entre el primer y segundo lugar no será tan amplia como se ha manejado. En materia de relación con los medios de información, muchas empresas reafirman su elección con los anuncios de salidas de líderes de opinión antes y después del proceso electoral. Por último, el voto diferenciado mostrará cómo nadie es profeta en su tierra, donde hay que estar atentos a los resultados de la capital, gobernada desde hace 27 años por una clase política que pasó de ser progresista, en algunos momentos, a un grupo de políticos muy cuestionados. Al final lo peor del asunto es que el ganador de la capital se convertirá en la principal oposición de cara a 2030, lo que mostrará desde ahora que la caballada no está flaca, sino que tiene anemia electoral.
Comunicólogo político, académico de la FCPyS UNAM y Maestro en Periodismo Político @gersonmecalco