Pese a que por un momento las alarmas de alerta se encendieron en la casa real británica, debido a la delicada salud de la reina Isabel II, la agenda oficial de algunos miembros de la familia se mantiene y comienza a reactivar sus actividades presenciales tal y como lo han hecho los duques de Cambridge.
Esta mañana, el príncipe William y Kate Middleton fueron los invitados de honor a la celebración del Día de San Patricio, el santo patrono de Irlanda, que se realiza con el tradicional desfile en el Primer Batallón de Guardias Irlandeses, situado en la ciudad de Aldershot, a las afueras de Londres.
En el acto, como es de costumbre, Middleton de 40 años, robó las miradas con su impecable y nuevo look.
Fiel a sus códigos de vestimenta, la duquesa eligió un atuendo que hiciera honor a la celebración y dado que el clima aún es frío en la región, la prenda estrella fue un abrigo verde.
Se trató de un exclusivo diseño hecho a medida firmado por la marca británica Laura Green London, de estilo militar con cinturón y confeccionado en lana, que alcanza un precio aproximado de 3 mil 787 euros (87 mil pesos mexicanos).
El abrigo "Emilia" es descrito por la marca como "una pieza distinguida”, que además se hace bajo pedido y el tiempo de espera es de 8 a 12 semanas.
Está terminado con un collar de daga estructurado con epaulettes sujetados con botones de cuero marino y hasta el momento, es una de las piezas más caras que Kate ha lucido recientemente.
Los complementos del look fue un sombrero tipo pillbox de Lock & Co. Hatters, hecho en fieltro suave y se abrocha con un elástico ajustable en la nuca, este se usa de lado. Los zapatos también fueron en juego y firmados por Emmy London.
Sobre su pecho llevó un broche dorado en forma de trébol, que forma parte de la colección de joyas de la reina madre. Y los aretes fueron Cartier.
Tanto el príncipe William como Kate llevaban como en forma de prendedores, un ramito de tréboles en homenaje a Irlanda y se han encargado de repartir esta planta a los soldados del regimiento y a la mascota del regimiento, un perro de raza lobero irlandés de nombre Turlough Mor a quien la duquesa no dudó en acariciar.