Desde el 2017, los duques de Cambridge, el príncipe William y Kate Middleton viven cómodamente en el apartamento 1A en el palacio de Kensington, sitio que piensan abandonar en los próximos meses para mudarse (como ya se había especulado anteriormente), muy cerca de la reina Isabel II.
De cuerdo al diario británico The Sunday Times, la pareja planea instalarse en Adelaide Cottage, una vivienda que es propiedad de la soberana de 96 años y que se ubica en el poblado de Berkshire, muy cerca de su nueva residencia oficial, el Castillo de Windsor.
Este significativo cambio, también representa la adopción de un nuevo estilo de vida para la pareja, así como una cercanía con los papás de Kate, Carole y Michael Middleton, quienes viven en el condado de Bucklebury, a unos 40 minutos de su nueva residencia.
¿Cómo será el nuevo hogar?
La modesta nueva propiedad de los Cambridge cuenta con sólo cuatro dormitoritos y se localiza al oriente del castillo de Windsor, es decir, a unos cuantos minutos de la capilla de San Jorge, donde se han celebrado importantes ceremonias de la familia real, como la boda del príncipe Harry con Meghan Markle, o el memorial del Duque de Edimburgo, entre otras.
Se trata de Adelaide Cottage una casa que fue construida en 1831 como un refugio para la esposa de Guillermo IV, la reina Adelaide de Saxe-Meiningen, pero se cuenta, que también era el hogar favorito de la reina Victoria, quien a menudo disfrutaba desayunar ahí.
Aunque, la vivienda fue remodelada en 2015, aún conserva elementos originales como una chimenea de mármol, un dormitorio principal donde el techo está decorado con delfines dorados y algunos adornos de cuerda reutilizados que eran parte del yate real Royal George; además de siete puertas para entrar y salir hacia el Castillo de Windsor, con cierta privacidad.
¿Qué implica este cambio?
La sonada y esperada mudanza, implica algunos cambios para la familia. En primer lugar, los dos hijos mayores de la pareja, el príncipe George y la princesa Charlotte tendrán que abandonar sus estudios en la prestigiada escuela Thomas's Battersea, e iniciar un nuevo curso escolar, cerca de su nueva casa.
Según el sitio Page Six, el duque y la duquesa de Cambridge desde tiempo antes, ya habían estado buscando escuelas en Berkshire para sus tres retoños.
Después, la vivienda que desocuparán se convertirá en oficinas privadas y de prensa. Mientras que la mansión Anmer Hall,que fue el obsequio de bodas de parte de la reina Isabel II, será su refugio campestre para los fines de semana.