Las primeras lecturas que funcionarios culturales realizaron en su niñez, fueron determinantes para sensibilizar su vocación al servicio a la comunidad y para nutrirlos como escritores, como el caso de Paco Ignacio Taibo II y Rosa Beltrán.
En el marco del Día del Niño, dichos autores, además de la secretaria de Cultura Alejandra Frausto, el secretario de Cultura de la Ciudad de México, Alfonso Suárez del Real, dieron los títulos de sus primeros libros. La historia interminable y Momo de Michael Ende; Rosas de la Infancia: Lectura para los niños de María Enriqueta Camarillo y Poesías de Margarito Ledesma son las novelas que Frausto disfrutó de niña y que influyeron su gusto en distintos géneros literarios.
Rosa Beltrán, directora de Literatura de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), comenta cómo fue su encuentro con la lectura fuera de las aulas: "Desde chica mi madre no solamente me leía historias, las inventaba. Ella me contaba qué pasaba en el mundo. Como es una gran narradora, me pintaba un buen panorama. Hija de un editor, para ella era importante que sus hijos leyeran". Los libros de adolescencia de la escritora, fueron: La Metamorfosis de Franz Kafka y Madame Bovary de Gustave Flaubert.
Por su parte, el director general del Fondo de Cultura Económica (FCE), Paco Ignacio Taibo II, expresa que entre las publicaciones que leyó en sus primeros años infancia, están Robin Hood (autor anónimo) "me marcó durísimo, fue lo primero que leí, a los cinco años, después Sandokán, el tigre de Malasia de Emilio Salgari y Los tres mosqueteros es una novela del escritor Alejandro Dumas".
Por su parte, Suárez del Real manifiesta que Platero y yo de Juan Ramón Jiménez fue el primer ejemplar que tuvo en sus manos.
También lo impactó la trama de El Principito de Antoine de Saint-Exupéry. Lilus Kikus de Elena Poniatowska fue determinante para él como lector porque después la vio en teatro y ahí conoció de niño, que las novelas se pueden adaptar.