La compañía mexicana de teatro Sa’as Tun sigue dando de qué hablar a nivel internacional y ahora lo hará desde España, donde el fin de semana ofrecerá funciones de la obra “Del Manantial del corazón”, que entre otros temas aborda el rito del Hetzmek, que prepara a los niños para la vida y la muerte.
Primero lo hará mañana y el sábado como parte del programa del Festival Iberoamericano de Teatro de Cádiz, luego, como invitada a la 31 Muestra Internacional de Investigación Teatral de Sevilla.
La pieza se estrenó en junio de 2015 y ya tiene unas 110 funciones dentro y fuera del país; y en julio pasado representó a México en el 31 Festival Internacional de Teatro de Miami, y luego en el Latinoamericano de Argentina, donde el público se conmovió con el texto poético del que brota la sensibilidad de la gente del Mayab.
Sobre lo que ello representa para Sa’as Tun, su fundadora, la actriz, dramaturga Conchi León explicó a Notimex que “Del Manantial…” se ha convertido en otro montaje entrañable, no sólo por la respuesta del público sino porque “me ha vuelto a colocar en importantes festivales de México y el mundo”.
“Estuvimos en Estados Unidos, Argentina y ahora en España; además, ganamos el programa nacional de teatro escolar y tendremos una temporada fuera de nuestro estado”, agregó la también autora de “Cachorro de León” y “Mestiza Power”.
En lo humano, acotó, “nos ha permitido acercarnos a mujeres que han vivido una historia similar y viven su catarsis con nosotras”.
De esta obra valora además la disposición amorosa del público para participar activamente en el Hetzmek escénico y su enorme sorpresa de saber que en Yucatán perduran los rituales mayas a pesar de la modernidad. Como directora, abundó, también ha aprendido a vivir los cambios naturales de la obra, actores que vienen o van, pero un equipo de producción e iluminación que se antoja eterno.
Conchi León, al lado de Addy Teyer, Salomé Sansores, Mabel Vázquez, Estrella Borges y Lourdes León, integran el elenco de este montaje, resultado de una investigación sobre los ritos del pre, postparto, nacimiento y muerte de los niños del Mayab.
“Me gustaría decir que estos relatos son producto de la ficción, pero no es así; éstos relatos tienen rostro, nombre, ciudad y el suplicio de las mujeres que perdieron a sus hijos, algunas de ellas ni siquiera pudieron verlos muertos”, explica León en la ficha de presentación de la obra.
“México es un país lleno de tradiciones con respecto a la muerte, pero en los últimos tiempos la muerte impune de los niños se ha vuelto parte de la tradición. Me niego a ello, a que más mujeres enloquezcan ante el hecho de saber muertos a sus hijos y no poder despedirse de ellos”, sostiene la dramaturga. Y es que esta pieza de teatro testimonial, que cuenta con escenografía de Juliana Faesler, iluminación de Esaú Corona, música original de Pedro Carlos Herrera, y producción de Oswaldo Ferrer, también es un llamado a la sociedad, una consigna de “no más niños muertos en la impunidad, no más niños muertos por la violencia del mundo”.