La ceremonia de los NFL Honors tuvo un momento emotivo la noche del jueves cuando apareció Damar Hamlin, jugador de los Buffalo Bills, quien se debatió entre la vida y la muerte al sufrir un paro cardiaco durante el juego ante los Bengals, el pasado 2 de enero.
La aparición del defensivo de los Buffalo Bills provocó una gran ovación en el escenario del Symphony Hall de Phoenix, Arizona, pues se ha convertido en un ejemplo de vida tanto dentro como fuera de los emparrillados.
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Hamlin aseguró que pese a que su vida estuvo en riesgo, no piensa dejar su sueño de jugar en la NFL.
“Primero que nada, le doy gracias Dios por estar aquí”, expresó al iniciar su discurso.
Asimismo, se dijo sorprendido porque su difícil experiencia ha servido “para animar a tantos en todo el país e incluso en todo el mundo, animar a orar, animar a difundir el amor y animar a seguir luchando, sin importar las circunstancias”.
“Mi visión era jugar en la NFL y ser el mejor jugador que pudiera ser, pero el plan de Dios era tener un propósito mayor que cualquier juego en este mundo”, agregó.
“Tengo un largo viaje por delante, un viaje lleno de incógnitas y un viaje lleno de hitos, pero es mucho más fácil enfrentar tus miedos cuando conoces tu propósito”, aseveró el defensivo de Buffalo.
Damar Hamlin abandonó el estrado con la seguridad de que “el viaje continuará”.
|| Con información de Jorge Briones / ESTO ||