Los gigantes petroleros de Rusia y Arabia Saudita se han negado a reducir sus producciones de crudo, lo que ha hundido su precio en 60% respecto a donde se ubicaba hace un año debido a una sobreoferta en el mercado. En esta guerra de precios México se encuentra entre los 20 países que más dinero están perdiendo, pues sólo en 2018 sus exportaciones petroleras representaron el 2.3 por ciento del mercado global.