Con los votos a favor de la ministra Yasmín Esquivel Mosa y de los ministros Luis María Aguilar Morales y Javier Laynez Potisek, la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió otorgar un amparo directo a Grupo Salinas y a su empresa Totalplay para evitar el pago de 545 millones de pesos de impuestos.
La instancia jurisdiccional del máximo órgano de justicia del país, encargado de resolver juicios de amparo, determinó que las empresas de Ricardo Salinas Pliego no aplicaron deducciones de manera indebida.
También resolvieron que el dueño de Banco Azteca, Grupo Elektra, TV Azteca, entre otras compañías, no aplicaron estas deducciones en conceptos como comisiones a distribuidores o gastos administrativos, por lo que fallaron, por mayoría de votos, en otorgar dicho amparo para no pagar ese impuesto al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
La ministra Lenia Batres Guadarrama y el ministro Luis María Aguilar Morales votaron en contra del proyecto.
Grupo Salinas emitió un comunicado para celebrar la resolución de la Segunda Sala de la SCJN, y señaló que será “el primero de muchos a nuestro favor”
El corporativo de Salinas Pliego reiteró que existe un “acoso sistemático por parte del SAT” en contra de las empresas que integran Grupo Salinas.
“Para que a nadie le quede duda: ¡aquí estamos y aquí seguimos!”, mencionó el conglomerado en el comunicado.
La resolución se da en el marco de la guerra de declaraciones que desde hace unos meses mantienen el presidente Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Salinas Pliego, sobre todo por las acusaciones del mandatario de que dicha empresa tiene deudas con el fisco, que no ha querido pagar por distintos amparos que ha interpuesto.
Grupo Salinas, en cambio, mencionó en su comunicado de esta tarde que dicha sentencia “confirma la arbitrariedad e inconstitucionalidad con la que se ha conducido el SAT contra Total Play”.
Hace dos semanas, López Obrador reveló en su conferencia matutina que ofreció a Ricardo Salinas Pliego una quita de 8 mil millones de pesos a la deuda fiscal por 24 mil millones de pesos, que el empresario tiene con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), pero el tabasqueño dijo que el empresario no lo quiso.