La industria textil en México prevé pérdidas económicas tras los apagones a inicios de mayo.
"Las fábricas en la industria textil trabajan 24 horas, 365 días al año, y los procesos deben ser continuos. Los apagones son una interrupción costosa que nos preocupa mucho y esperamos que ya se pueda controlar", afirmó Rafael Zaga, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex) tras la presentación del boleto de la Lotería Nacional por el 87 aniversario del organismo.
Zaga señaló que aún no tienen un estimado del daño económico a las 120 empresas textiles que representa. Sin embargo, aseguró que por cada minuto sin energía eléctrica la producción se detienen de 48 a 72 horas.
Agregó que procesos como hilados, tejidos y acabados fueron interrumpidos por los apagones y al regresar la energía, tenían que comenzar desde cero. Además, dijo que los cortes eléctricos podrían dañar la maquinaria que actualmente es cien por ciento digital.
"En los últimos años, la industria textil se ha tecnificado mucho, adoptando tecnologías como la inteligencia artificial para procesos completamente automáticos. Cuando se desconecta un proceso de golpe, debe reiniciarse, y esto puede dañar las máquinas, las cuales no se consiguen fácilmente".
El daño a la maquinaria implica que las empresas enfrenten elevados costos de refacciones y reparaciones, además de tiempos de reparación de hasta tres meses, afectando la producción.
"Un corte de luz pega mucho, implica no solo reiniciar el proceso, sino que si se daña una máquina, estas son europeas de alta tecnología y precisión, entonces tienes que parar la producción hasta un mes para repararlas o inclusive, esperar una refacción".
De acuerdo con la Canaintex, en los últimos seis años la industria textil invirtió cerca de cuatro mil millones de dólares en innovación y tecnologías para que la industria sea más sustentable, tecnificada, automatizada.
Los estados con mayores afectaciones de acuerdo con sus agremiados son Hidalgo, Estado de México y Ciudad de México, mientras que en el norte del país, donde han reportado las alertas y emergencias, no se han observado impactos en la industria.
Zaga afirmó que el sector privado está dispuesto a invertir en plantas de generación o hidroeléctricas, por lo que es necesario que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) apruebe más permisos para enfrentar este tipo de contingencias.
"Pedimos que se liberen más permisos para que la industria textil pueda ser parte de la solución, no parte del problema en el consumo. Nosotros podemos poner paneles solares, podemos invertir en hidroeléctricas, en energías verdes y podemos ser parte de esa solución", afirmó Zaga.
Asimismo, confió en que las energías verdes comiencen a producir mayor capacidad y que las temporadas de lluvias permitan a las hidroeléctricas colaborar más eficazmente con el sistema eléctrico.
El líder textil anotó que la industria pierde competitividad no solo por los apagones, sino porque en México los precios de la electricidad son dos punto cinco veces más altos que en Estados Unidos, lo que se traduce en mayores costos de manufactura.
Hizo un llamado al gobierno federal para mejorar la comunicación con el sector para que se den avisos de los cortes y que las empresas puedan prepararse para los apagones.