En su primer disco Mateo Kingman sumergió a sus oyentes hasta la selva amazónica, lugar donde creció, con sus ritmos y sonidos naturales.
Esta vez, en su segundo material, los sintetizadores serán los encargados de crear las atmósferas, conservando algunos tintes naturales.
“El primer disco es un disco que es una interpretación de lugares de mi vida, por eso las canciones tienen muchas grabaciones de agua, de aves, el nuevo en cambio, se ambienta de sintetizadores, distintos timbres de voces, es un poco de la mezcla de esos mundos”, asegura en entrevista telefónica desde Quito, Ecuador para Organización Editorial Mexicana.
El cantante llegará a México para presentar su nueva producción discográfica desde uno de los escenarios del Vive Latino en su edición número 20, y en diversas ciudades del país, “estar en México siempre es increíble, vamos a tocar en la noche y vamos a hacer un show bastante bailable, más trance y galáctico, bien espacial, atmósférico y psicodélico”.
Para Kingman su nuevo material es un viaje que para ser comprendido tiene que ser escuchado en su totalidad, Religar es el primer sencillo de la producción que nace de "una necesidad mía de contar mis preocupaciones; me gustaría poder transmitir a la gente esos cuestionamientos”.