El próximo 1 de septiembre, Raúl Torres Guerrero se convertirá en el primer diputado que represente a los capitalinos que viven en el extranjero, con la finalidad de tomarlos en cuenta para la toma de decisiones del país.
De madre mexicana y padre peruano, el panista busca impulsar una agenda a favor de la comunidad que reside en otras partes del mundo, en la que destaca la creación de un fondo para el migrante en retorno para brindar un apoyo económico por tres meses a los paisanos que regresan para que emprender y se integren al mundo laboral de la Ciudad de México.
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“Quiero que exista un programa social para nuestros migrantes en retorno, para que puedan volver a emprender sus negocios y tengan un colchón para reincorporarse”, refiere Raúl Torres.
En entrevista con El Sol de México menciona que otra de sus propuestas tiene que ver con el otorgamiento de apoyos económicos del gobierno y del sector privado a los jóvenes que estudian en el extranjero. "Quiero, desde el Congreso de la Ciudad impulsar una agenda para la juventud. Los jóvenes que se van al extranjero a estudiar también deben ser apoyados, después van a volver a país y aquí aplicarán sus conocimientos".
Dentro de sus propuestas está que dicho sector pueda tramitar su licencia de conducir a distancia, así como impulsar una agenda de género para la mujer migrante y la creación de un Centro de atención en el exterior.
“Con este Centro vamos a quitar el tema de los intermediarios, cuando tú quieres emigrar no hay nadie que te guíe, no hay nadie que te diga la forma correcta de hacerlo, aplicar documentos. Hay que dar acompañamiento a quienes hayan tomado la decisión de hacerlo”, refiere.
Su objetivo principal como legislador será velar por los derechos de quienes viven fuera de México. “Fuera del territorio nacional hay miles de mexicanos y lamentablemente han sido olvidados por el Gobierno Federal. A mí me toca velar por sus inquietudes”, subraya.
Todo ello, explica, será gestionado desde módulos virtuales y redes sociales para atender a todos los capitalinos en distintos países.
"La comunicación con las comunidades migrantes tendrá que ser vía redes sociales, no hay otra forma. Las tecnologías deben ser también protagonistas, a través de la tecnología podremos comunicarnos con nuestros paisanos y así, intercambiar puntos de vista y expresen sus inquietudes", asegura.
