Antes de que llegue el éxodo de migrantes a la Ciudad de México, sus autoridades los apoyarán y les tenderá un puente humanitario con brigadas de salud, educadoras, acompañamiento psicológico y trabajadoras sociales.
Lo anterior fue anunciado por el mandatario local, José Ramón Amieva, quien dijo que en la capital ya se busca un sitio con capacidad suficiente para albergar a los siete mil 400 migrantes, a fin de que reciban alimento, abrigo, estén bien atendidos y recuperen fuerzas.
Agregó que en la víspera se reunió con las comisiones de Derechos Humanos nacional y local para definir el operativo de auxilio, y se estimó que al paso que vienen llegarán a la capital en tres semanas “para recargar la pila del corazón”.
El jefe de Gobierno explicó que en esa junta se decidió no calificar más de caravana a ese contingente y llamarlo éxodo de migrantes, porque fueron forzados a salir de su nación y en su mayoría son originarios de Honduras.
Migrantes enfrentan enfermedades por malnutrición
Los representantes de la Organización de las Naciones Unidas, del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y la Familia y las comisiones Nacional y capitalina de Derechos Humanos informaron que ya hay brotes infecciosos, problemas de salud en niños, mujeres embarazadas y personas de la tercera edad y falta de alimentos.
Con base en esos informes, es que se tomó la decisión de no esperar a que lleguen los migrantes a la Ciudad de México y se ofreció, a través de la Secretaría de Gobierno, crear un puente humanitario, pero el mandatario pidió garantizar un traslado seguro de las brigadas médicas.
Y solicitaremos, además, la intervención de la sociedad de esta ciudad para generar acopio y traslado porque es un puente humanitario de atención y un puente humanitario de insumos; no podemos, si está en nuestras manos, dejar que las personas se enfermen e incluso puedan llegar a morirse José Ramón Amieva Gálvez
Alistan centros de ayuda
En este sentido, se tiene previsto instalar centros para recibir la ayuda humanitaria de los capitalinos, como se ha hecho en otras ocasiones cuando hay desastres en el país en el extranjero.
Se tiene previsto inicialmente el envío de cuatro brigadas integradas por 120 a 150 personas, mientras aquí en la Ciudad de México se buscará un sitio o más bastantes amplios para darles refugio, porque en los centros de atención e integración social solo se pueden albergar a mil 200 personas; y también es necesario saber cuánto tiempo se les puede atender.
Descartó que el éxodo de migrantes tenga planeado quedarse en la Ciudad de México, donde serán atendidos lo mejor posible, porque han manifestado su interés de seguir a la frontera norte.
Asimismo, se acordó formar un equipo de trabajo para garantizar los derechos de los migrantes y con el ACNUR plantear un programa de reinserción de los refugiados y generar un catálogo de derechos incluyentes.
Finalmente, el espacio que se les habilite en la Ciudad de México debe prever que las familias de los centroamericanos no se desintegren y se mantengan unidas.