Ante la inminente crisis de ingresar a la fase II del Coronavirus no podrán asistir a su centro de trabajo servidores públicos adscritos a las alcaldías, dependencias, órganos desconcentrados y entidades de la Administración Pública en la Ciudad de México pero deberán cumplir con tres requisitos.
No asistirán en caso de presentar síntomas compatibles con el Covid-19 y deberán aislarse en su domicilio y atender las recomendaciones médicas. Además los trabajadores del gobierno que son padres deberán permanecer en sus casas, pero sólo aquellos que tengan a su cargo el cuidado de sus hijos pues ya no acudirán a la escuela como lo anunció la Secretaría de Educación Pública.
Explicó que normalmente cuando un trabajador del gobierno está enfermo lo que hace es que va a su centro de salud del ISSSTE, ahí le dan un comprobante y lo presenta pero en este caso, cuando tengan enfermedades respiratorias agudas no irán a su clínica para no saturarlos pero se inscribirán a través del anunciado esquema por SMS.
Sheinbaum Pardo dijo que es importante en la medida de lo posible ir permaneciendo en casa de una manera responsable y por eso como gobierno ya están tomando estas medidas con los funcionarios públicos por lo que pidió a los empresarios hacer lo mismo e incluso sin descontarles el salario.
Esto para el abogado especialista en derecho laboral de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alfonso Bouzas, es algo que debe negociar el trabajador con su empleador pues la Ley Federal del Trabajo no lo exige.
Comentó que sólo en el caso de que se decrete contingencia sanitaria es cuando el empleado puede estar en casa pero será un golpe económico para los trabajadores pues la ley menciona que el patrón estará obligado a pagar a sus trabajadores una indemnización equivalente a un día de salario mínimo general vigente por cada día que dure la suspensión, sin que pueda exceder de un mes.
Exhortó al gobierno federal a que si se decreta la contingencia redacten todo a favor a los trabajadores con distintas obligaciones para las empresas, como la de regresar a la misma planta laboral y obligar a los empresarios a no violentar los derechos de los trabajadores.
Esta situación también será crítica para los trabajadores informales pues ante el aislamiento de las familias no habrá ingresos. En la ciudad, 5 de cada 10 trabajadores tiene un empleo informal, por lo que Bouzas hizo un llamado a implementar un programa de auxilio.