"Traigo muy buenas noticias- produjo a guisa de saludo el presidente Andrés Manuel López Obrador para luego cauto, cauteloso añadir: "Ya existe un proyecto para tener una vacuna contra esta pandemia. Eso significaría tranquilidad y salud. Esto es algo excepcional. Ayudará a mantener viva la esperanza. Que se liquide la incertidumbre. Que se vea una posibilidad de vida mejor. Sana de coronavirus. Pandemia que causa dolor y tristeza en todo el mundo”.
Con toda seguridad - en otro tiempo, el de "antes"-semejante comunicación habría derivado en aplausos, felicitaciones, abrazos, palmadas estampida de reporteros hacia los teléfonos más cercanos para ventilar a los cuatro puntos cardinales tan esperanzadora noticia. Ayer, no. Los asistentes al salón Guillermo Prieto - antaño llamado Tesorería- informadores en su mayoría no expresaron el menor asombro. Ni pizca de sorpresa. ¡Y con la mascarilla barrera al virus que cubre dos tercios del rostro...!
Impasible-hierático casi -, el presidente López Obrador orquestó. " El Canciller Marcelo Ebrard dirigirá esta conferencia circular”.
El señor Carlos Slim Domit. El Canciller Marcelo Ebrard. El Premio Nacional de Ciencias médico cirujano y secretario de Salud, Don Jorge Alcocer, a quien toca presentar a su antiguo alumno Don Hugo López-Gatell. La muy bien informada señora Silvia Varela. Rostro, presencia de la farmacéutica británica AstraZeneca y la Universidad de Oxford.
Pues Marcelo Ebrard sintetiza. Negociaciones del presidente López Obrador con Donald Trump. Embajadores ante la ONU. Discurso ante el G20 “Que ninguna nación por rica y poderosa que sea, lucre con medicamentos que urgen a la Humanidad. Que no las acaparen. Que no sean instrumento de discriminación”.
Visión que saludó unánime la ONU. Simultáneamente el Canciller Ebrard emprendió discretas negociaciones con gobiernos, universidades, centros de investigación, firmas farmacéuticas laboratorios y hombres de ciencia. Trato que consiguió la adscripción de México a sendos proyectos cuyo horizonte es dar con la vacuna preventiva o cura del coronavirus.
Salud que interesa al Ingeniero Mexicano Don Carlos Slim quien la noche del 8 de julio en la Casa Blanca, en Washington planteo al Presidente López Obrador su disposición de adherirse al proyecto. López Obrador lo aprobó. Fundación Carlos Slim aportara entre 150 y 200 millones de dólares.
La señora Silvia Varela voz y presencia de AstraZeneca Universidad de Oxford reseñó: "La investigación se halla en Fase III Quien inicio el experimento, uso a sus tres hijos " conejillos de Indias". Es altamente probable que en el próximo noviembre termine esa Fase III. Los protocolos indican que diversas autoridades sanitarias- algunas de alcance mundial y regional- habrán de aprobar los bien documentados estudios.
"Quizá en el primer trimestre del año 2021 tan preciado bien científico se produzca industrial, masivamente. En América Latina Argentina y México la fabricaran. Convinieron en ponerla disposición de Latinoamérica y El Caribe.
Oportuno decir aquí que mientras ese proyecto se materializa, México continúa afiliado, asociado, a otros cuatro intensos trabajos que distintos sabios desarrollan en otras partes del mundo.
López Obrador se privó de zarandear a sus adversarios. Los corruptos hipócritas conservadores.
Fragmentos de la mañanera de este jueves en el Palacio Nacional.
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