/ martes 5 de mayo de 2020

No sabemos si se está llegando al pico de contagios: Carlos del Río

El investigador Carlos del Río considera que es momento de invertir más en salud y menos en la refinería de Dos Bocas

Es “preocupante” lo que ocurre en México porque sin datos, con hospitales que llegan a su capacidad o son rebasados, sin las pruebas necesarias “no se sabe si está llegando el pico” de contagios de Covid-19, aunque aún es momento de “corregir” en el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y hacer un llamado de coordinación nacional para enfrentar la epidemia, asegura Carlos del Río, profesor de Medicina y Salud Global de la Universidad de Emor en Atlanta.

El investigador miembro de la Sociedad Internacional Antiviral de Estados Unidos, considera también que “es momento de que se utilice esta oportunidad para invertir más en salud y menos en Dos Bocas”.

En entrevista con El Sol de México, propone cinco medidas para poder enfrentar esta etapa de contagios en el país: hacer más pruebas; reforzar la capacidad de hospitales; seguir los contagios de manera cercana; crear un programa de protección a la población vulnerable y mantener las medidas de distanciamiento.

Asegura que el Presidente tiene un gran liderazgo y debe utilizarlo para que sus seguidores hagan eco de las medidas de distanciamiento social, aunque considera que él y el presidente Donald Trump “son dos caras de la misma moneda” por el manejo dudoso que han dado a la emergencia sanitaria.

-En su opinión, ¿cómo considera que llega México a lo que se ha dicho será el pico de la epidemia?

-No sé si estemos llegando al pico, lo digo con toda franqueza, yo no veo datos que me digan que ésta va a ser la semana pico, creo que los casos van a seguir en aumento. Lo veo preocupante, la capacidad hospitalaria la vemos rebasada. Creo que los casos van a seguir en aumento.

- ¿El número de pruebas que se aplican para determinar cuántas personas fueron contagiadas, al ser selectivas, son un problema para este momento de la epidemia?

Absolutamente, sin saber cuánta gente está infectada es muy difícil. Lo que hemos aprendido de varios países que han tenido una respuesta exitosa es que las pruebas han sido fundamentales para una respuesta exitosa.

- ¿México está atacando la epidemia a ciegas?

Quiere decir que México está en cierta manera ante una respuesta no informada. Lo que haría falta es aumentar el número de pruebas de manera muy significativa. Cuando uno ve el número de pruebas por el millón de habitantes que tiene México está muy por debajo de lo que otros países tienen. Los datos muestran que México está haciendo 707 pruebas por millón de habitantes; España ha hecho 32 mil 799 pruebas; Italia 35 mil pruebas; Brasil que es un país como nosotros grande y latinoamericano ha realizado mil 597 pruebas, que es el doble de las que ha aplicado México. Perú y Chile incluso hicieron 10 mil pruebas por millón de habitantes. Somo el país que ha realizado el menor número de pruebas en América Latina por millón de habitantes. Tenemos que aumentar el número, no cabe duda.

-Es escenario es qu8e no hay pruebas, los hospitales están a su máxima capacidad, hay poco respeto a las medidas de quedarse en casa, ¿este coctel de qué nos dice?

Al final lo que implica es gente, son muertes. Va a ver una mayor cantidad de personas que van a morir, una elevada mortalidad a consecuencia de la epidemia. Hay que reconocerlo y hay que decir que lo que va a pasar.

-¿Es momento de corregir?

Siempre hay momento de corregir. Nunca es tarde para hacer lo correcto. Nunca es tarde para hacer lo que hay que hacer. La epidemia no va a terminar en ningún momento. En lugar de estar pensando o deseando que termine, como lo está diciendo el presidente, es mejor tratar de corregir y México tiene la experiencia, la capacidad y la trayectoria para hacer lo correcto. Tiene las personas dedicadas a la salud y lo que falta es que los dejen hacer su trabajo.

-¿Qué se necesita hacer para que se reconduzca?

Hay que escuchar a los expertos, hay que juntar a todos los sectores y pedir la colaboración del sector público y del sector privado, de todos los sectores para hacer frente a la epidemia.

El Presidente tiene que asumir una actitud realista de que esto es un problema, que lo podemos resolver de manera coordinada si trabajamos conjuntamente, en lugar de estar diciendo que esto ya se va a acabar, como ha estado diciendo, mejor decir qué podemos hacer de manera conjunta para hacer frente a esta epidemia.

-Cuáles podrían algunas medidas para reconducir las políticas de atención a la epidemia?

La primera es hacer más pruebas para saber qué tan severo es el problema; la segunda hay que hacer un reforzamiento de los hospitales para que no se vean sobrepasados; va a tener que establecer un seguimiento de contactos muy estrecho; la cuarta va a tener que crear un programa de protección de poblaciones vulnerables; y la quinta, será importante el mantener medidas de distanciamiento social y de protección continuar el uso del cubrebocas y la recomendación de que la gente no salga.

-El subsecretario Hugo López-Gatell ha dicho que no sirve usar el cubrebocas, ¿es real que no sirve de nada?

Sí sirve, si tiene cierta utilidad. No le voy a decir que es perfecto, pero decir que no sirve de nada, no es cierto. No es perfecto. Lo que la gente no entiende es que se usa el cubrebocas no para protegerme a mí sino es para proteger a otros. Si todos lo usamos todos nos protegemos. Sería muy importante que la gente vea que usar cubrebocas no es perfecto, pero tiene una función y un valor y es algo que nos puede ayudar si lo hacemos correctamente.

-¿El sistema de salud podría colapsar si se propaga aún más el virus?

No sé lo suficiente del sistema de salud, pero la experiencia que tenemos es que no debemos subestimar el impacto de este virus en cuanto al impacto al sector salud. Quienes están en los hospitales podrán decir cómo están las cosas, pero en mi opinión no sobreestimemos a este bicho, sobreestimarlo va a causar problemas muy serios.

--Los estudiosos hablan de que cuando un gobierno toma medidas más políticas hay poca capacidad de reacción, ¿es así?

Empecemos por decir, y le doy la razón al presidente, no quiere decir que las cosas estaban bien antes. Somos un país que tenemos un problema, tenemos una subinversión en salud de muchos años y la gente más vulnerable de esta epidemia es la gente pobre, la gente desprotegida y yo siento que es la gente que este gobierno dijo que iba a proteger. Lo correcto sería hacer lo necesario para evitar los contagios. Al final de cuentas ¿en dónde está el contagio más severo en la ciudad de México? En Iztapalapa. Creo que el punto más importante es que no estamos ante un problema nuevo. Creo que es momento de que se utilice esta oportunidad para invertir más en salud y menos en Dos Bocas.

-¿Qué medidas requieren los más vulnerables?

Mucha gente pobre vive en poco espacio y tiene necesidades de trabajar. Hay que entender que el distanciamiento social es un lujo y tenemos que establecer los programas sociales para poder proteger a los vulnerables, no sólo a las personas con obesidad y a los diabéticos que son vulnerables de salud pueden morir, todos se van a infectar.

-¿Qué opinión le merece que hasta ahora algunos gobernadores han tomado sus propias medidas de respuesta ante el Covid-19, distanciado de lo que propone la Secretaría de Salud?

En todas las pandemias se mete la política y ese es un problema. Pero al final tiene que hacerse una respuesta basada en ciencia y no en política.

Es “preocupante” lo que ocurre en México porque sin datos, con hospitales que llegan a su capacidad o son rebasados, sin las pruebas necesarias “no se sabe si está llegando el pico” de contagios de Covid-19, aunque aún es momento de “corregir” en el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y hacer un llamado de coordinación nacional para enfrentar la epidemia, asegura Carlos del Río, profesor de Medicina y Salud Global de la Universidad de Emor en Atlanta.

El investigador miembro de la Sociedad Internacional Antiviral de Estados Unidos, considera también que “es momento de que se utilice esta oportunidad para invertir más en salud y menos en Dos Bocas”.

En entrevista con El Sol de México, propone cinco medidas para poder enfrentar esta etapa de contagios en el país: hacer más pruebas; reforzar la capacidad de hospitales; seguir los contagios de manera cercana; crear un programa de protección a la población vulnerable y mantener las medidas de distanciamiento.

Asegura que el Presidente tiene un gran liderazgo y debe utilizarlo para que sus seguidores hagan eco de las medidas de distanciamiento social, aunque considera que él y el presidente Donald Trump “son dos caras de la misma moneda” por el manejo dudoso que han dado a la emergencia sanitaria.

-En su opinión, ¿cómo considera que llega México a lo que se ha dicho será el pico de la epidemia?

-No sé si estemos llegando al pico, lo digo con toda franqueza, yo no veo datos que me digan que ésta va a ser la semana pico, creo que los casos van a seguir en aumento. Lo veo preocupante, la capacidad hospitalaria la vemos rebasada. Creo que los casos van a seguir en aumento.

- ¿El número de pruebas que se aplican para determinar cuántas personas fueron contagiadas, al ser selectivas, son un problema para este momento de la epidemia?

Absolutamente, sin saber cuánta gente está infectada es muy difícil. Lo que hemos aprendido de varios países que han tenido una respuesta exitosa es que las pruebas han sido fundamentales para una respuesta exitosa.

- ¿México está atacando la epidemia a ciegas?

Quiere decir que México está en cierta manera ante una respuesta no informada. Lo que haría falta es aumentar el número de pruebas de manera muy significativa. Cuando uno ve el número de pruebas por el millón de habitantes que tiene México está muy por debajo de lo que otros países tienen. Los datos muestran que México está haciendo 707 pruebas por millón de habitantes; España ha hecho 32 mil 799 pruebas; Italia 35 mil pruebas; Brasil que es un país como nosotros grande y latinoamericano ha realizado mil 597 pruebas, que es el doble de las que ha aplicado México. Perú y Chile incluso hicieron 10 mil pruebas por millón de habitantes. Somo el país que ha realizado el menor número de pruebas en América Latina por millón de habitantes. Tenemos que aumentar el número, no cabe duda.

-Es escenario es qu8e no hay pruebas, los hospitales están a su máxima capacidad, hay poco respeto a las medidas de quedarse en casa, ¿este coctel de qué nos dice?

Al final lo que implica es gente, son muertes. Va a ver una mayor cantidad de personas que van a morir, una elevada mortalidad a consecuencia de la epidemia. Hay que reconocerlo y hay que decir que lo que va a pasar.

-¿Es momento de corregir?

Siempre hay momento de corregir. Nunca es tarde para hacer lo correcto. Nunca es tarde para hacer lo que hay que hacer. La epidemia no va a terminar en ningún momento. En lugar de estar pensando o deseando que termine, como lo está diciendo el presidente, es mejor tratar de corregir y México tiene la experiencia, la capacidad y la trayectoria para hacer lo correcto. Tiene las personas dedicadas a la salud y lo que falta es que los dejen hacer su trabajo.

-¿Qué se necesita hacer para que se reconduzca?

Hay que escuchar a los expertos, hay que juntar a todos los sectores y pedir la colaboración del sector público y del sector privado, de todos los sectores para hacer frente a la epidemia.

El Presidente tiene que asumir una actitud realista de que esto es un problema, que lo podemos resolver de manera coordinada si trabajamos conjuntamente, en lugar de estar diciendo que esto ya se va a acabar, como ha estado diciendo, mejor decir qué podemos hacer de manera conjunta para hacer frente a esta epidemia.

-Cuáles podrían algunas medidas para reconducir las políticas de atención a la epidemia?

La primera es hacer más pruebas para saber qué tan severo es el problema; la segunda hay que hacer un reforzamiento de los hospitales para que no se vean sobrepasados; va a tener que establecer un seguimiento de contactos muy estrecho; la cuarta va a tener que crear un programa de protección de poblaciones vulnerables; y la quinta, será importante el mantener medidas de distanciamiento social y de protección continuar el uso del cubrebocas y la recomendación de que la gente no salga.

-El subsecretario Hugo López-Gatell ha dicho que no sirve usar el cubrebocas, ¿es real que no sirve de nada?

Sí sirve, si tiene cierta utilidad. No le voy a decir que es perfecto, pero decir que no sirve de nada, no es cierto. No es perfecto. Lo que la gente no entiende es que se usa el cubrebocas no para protegerme a mí sino es para proteger a otros. Si todos lo usamos todos nos protegemos. Sería muy importante que la gente vea que usar cubrebocas no es perfecto, pero tiene una función y un valor y es algo que nos puede ayudar si lo hacemos correctamente.

-¿El sistema de salud podría colapsar si se propaga aún más el virus?

No sé lo suficiente del sistema de salud, pero la experiencia que tenemos es que no debemos subestimar el impacto de este virus en cuanto al impacto al sector salud. Quienes están en los hospitales podrán decir cómo están las cosas, pero en mi opinión no sobreestimemos a este bicho, sobreestimarlo va a causar problemas muy serios.

--Los estudiosos hablan de que cuando un gobierno toma medidas más políticas hay poca capacidad de reacción, ¿es así?

Empecemos por decir, y le doy la razón al presidente, no quiere decir que las cosas estaban bien antes. Somos un país que tenemos un problema, tenemos una subinversión en salud de muchos años y la gente más vulnerable de esta epidemia es la gente pobre, la gente desprotegida y yo siento que es la gente que este gobierno dijo que iba a proteger. Lo correcto sería hacer lo necesario para evitar los contagios. Al final de cuentas ¿en dónde está el contagio más severo en la ciudad de México? En Iztapalapa. Creo que el punto más importante es que no estamos ante un problema nuevo. Creo que es momento de que se utilice esta oportunidad para invertir más en salud y menos en Dos Bocas.

-¿Qué medidas requieren los más vulnerables?

Mucha gente pobre vive en poco espacio y tiene necesidades de trabajar. Hay que entender que el distanciamiento social es un lujo y tenemos que establecer los programas sociales para poder proteger a los vulnerables, no sólo a las personas con obesidad y a los diabéticos que son vulnerables de salud pueden morir, todos se van a infectar.

-¿Qué opinión le merece que hasta ahora algunos gobernadores han tomado sus propias medidas de respuesta ante el Covid-19, distanciado de lo que propone la Secretaría de Salud?

En todas las pandemias se mete la política y ese es un problema. Pero al final tiene que hacerse una respuesta basada en ciencia y no en política.