Carlos Siula / El Sol de México
Corresponsal
PARIÍS, Francia. (OEM-Informex).- Abandonado por tres ex primerministros y acosado por los barones de su partido, Nicolas Sarkozyse encuentra cada vez más aislado para postularse como salvador dela derecha en la elección presidencial de 2017.
El expresidente propuso ayer al consejo nacional de LosRepublicanos (LR) el borrador de un “proyecto colectivo”destinado a fijar la línea política que sostendrá el partido enla batalla electoral del año próximo.
Ese gesto de primera importancia quedó totalmente eclipsado porla ausencia de sus principales rivales en las primarias del 20 denoviembre para elegir al candidato presidencial del partido: losexprimer ministros Alain Juppé y François Fillon, así como BrunoLe Maire.
Sarkozy sufrió otro duro revés cuando un tercer primerministro, Jean-Pierre Raffarin, anunció su apoyo a la candidaturade Juppé. Hasta el sábado, Raffarin era presidente del ConsejoNacional, el parlamento del partido, pero renunció a ese cargopara poder alinearse junto a Juppé.
Al mismo tiempo, el exlíder del partido cuando aún se llamabaUnión para una Mayoría Popular (UMP), Jean-François Coppé,reveló que se presentaría a la elección interna que debedesignar al candidato del partido.
Para los próximos días también se espera el anuncio de laexministra Nathalie Kosciusko-Morizet. Incluyendo por último aHervé Mariton, Frédéric Lefebvre, Jean-Frédéric Poisson yHassen Hammou, se estima que las primarias de la derecha reunan entotal entre 10 y 12 candidatos.
Esa proliferación de candidaturas conspira contra lasposibilidades de Sarkozy, a pesar de los enormes esfuerzos quecomenzó a desplegar desde principios de año con la publicaciónde un libro, entrevistas por radio y televisión, y una serie dedesplazamientos al interior del país. Esa febril actividad resultaparadójica en la medida en que el expresidente todavía noanunció oficialmente su candidatura a las elecciones internas.
Consciente de las resistencias que suscita su regreso, Sarkozyparece utilizar la actual movilización para definir la líneapolítica del partido para 2017 a fin de calcular sus realesposibilidades de obtener la nominación por el voto de losmilitantes.
Los sondeos, por el momento, son francamente desfavorables.Desde noviembre, en que está prácticamente en igualdad con suprincipal adversario con 34 puntos cada uno, Sarkozy perdió cuatropuntos y Juppe ganó 7, según una encuesta del instituto IFOPdivulgada el 9 de febrero.
De esa forma ahora existe una diferencia de 11 puntos entreambos candidatos y la tendencia actual tiende a acentuarse, segúnlos expertos del instituto de sondeo.
Si la segunda vuelta prevista para el 27 de noviembre concluyeracon un duelo entre Sarkozy y Juppé, el expresidente solo reuniría38 por ciento contra 62 por ciento del exprimer ministro. Hayquienes afirman que, en esas condiciones, si no consigue modificarla actual tendencia, Sarkozy podría encontrar un pretexto pararetirarse y evitar una humillación.