El gobierno de Nicaragua arremetió en contra de México y su embajador en ese país, Gustavo Cabrera, quien retuiteó la declaración del escritor Sergio Ramírez en la que critica al régimen de Daniel Ortega de ordenar su arresto al acusarlo de “actos que fomentan e incitan al odio y la violencia”.
"Con el mensaje que usted ha difundido hoy en Nicaragua, usted y el Gobierno de México se colocan en una posición injerencista y entrometida, cumpliéndoles sumisa y fielmente a los yanquis, sirviéndoles en el rol que tristemente han venido ustedes asumiendo, de interventores permanentes en nuestros asuntos propios por encargo del imperio", reprocha la carta firmada por la canciller nicaragüense Arlette Marenco.
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El embajador de México en Nicaragua replicó la publicación en Twitter del novelista y Premio Cervantes 2017, Sergio Ramírez.
El columnista del diario La Nación de Argentina fue miembro de la Junta de Gobierno que asumió en Nicaragua tras el triunfo de la revolución sandinista de 1979, y fue vicepresidente de Daniel Ortega en su primer mandato de 1985 a 1990.
Sergio Ramírez es ahora un duro crítico del exguerrillero sandinista. Daniel Ortega es "un dictadorzuelo más de América Latina”, declaró en una entrevista publicada por La Nación a propósito de la orden de arresto en su contra.
La protesta del régimen de Ortega en contra de México y su embajador se originó por un retuit a una publicación del escritor.
En la carta, la Cancillería de ese país reclama que de su parte no ha habido comentarios sobre la violencia, crímenes y violaciones a los derechos humanos que, de acuerdo con organismos y personajes mediáticos, ocurren en México todos los días.
Tampoco, agrega en la misiva, han "recogido" las declaraciones de tantos personajes mediáticos en contra del presidente o el gobierno de México.
"Es lamentable el papel de miseria cultural, histórica y política, que hoy juega México", crítica el régimen de Ortega y exige al país cumplir su Doctrina Estrada.
La orden arresto en contra del escritor nicaragüense, quien ya se encuentra fuera de su país, provocó el repudio de diversos organismos internacionales.
El miércoles, el director para las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, criticó la medida y calificó al gobierno de Ortega como una “dictadura”.
En un pronunciamiento a mediados del mes pasado, la Organización de Estados Americanos (OEA) condenó los sucesivos “ataques a la libertad de expresión en Nicaragua” y “reiterados actos de persecución realizados por parte de las autoridades nicaragüenses en contra de medios de comunicación, periodistas, trabajadoras y trabajadores de la prensa registrados, en el contexto de las elecciones presidenciales de noviembre 2021″.
En los últimos meses siete aspirantes a la presidencia de ese país han sido detenidos por cargos similares a los que se atribuyen al escritor Sergio Ramírez.