Un presunto sicario adolescente de apenas 15 años de edad,provisto con una pistola calibre 9 milímetros, abastecida con ochobalas, fue detenido por la Policía Turística en el antro LaCucaracha, en la zona turística de Playa del Carmen.
El quinceañero fue detenido cuando presuntamente se disponía acometer una ejecución, dos días después del sangriento ataquearmado en el bar La Vaquita que dejó un muerto y dos heridosgraves y tres delincuentes detenidos, entre éstos el ComandanteFlama uno de los cabecillas de los Zetas, vieja escuela.
Cerca de la media noche se reportó la presencia de dos sujetosarmados en La Cucaracha, ubicado en la calle Seis, entre la QuintaAvenida y la Décima, razón por la cual al lugar señalado setrasladaron los agentes de la Policía Turística Municipal (PTM),logrando ubicar al joven de 15 años de edad, originario deComitán, Chiapas.
El menor dijo que actualmente vive en la ciudad de Tulum y lefue decomisada con una pistola calibre 9 milímetros, abastecidacon ocho cartuchos útiles, cuando presuntamente buscaba a lapersona a quien tenía el encargo de ejecutar.
Posteriormente, el joven fue llevado a las instalaciones de laDirección General de Seguridad Pública y Tránsito (SPTyB), paraque el departamento jurídico elaborara el oficio de su puesta adisposición del agente investigador del Ministerio Público delFuero Común (MPFC) adscrito a la Fiscalía Especializada enMenores de Edad en la ciudad de Cancún, para el deslinde deresponsabilidades.
EL PONCHIS
Hace siete años irrumpió en las conciencias de los mexicanosel caso de El Ponchis, el niño sicario de los Beltrán Leyva(adiestrado por Julio de Jesús Hernández Radilla alias El Negro)que a sus 14 años, al ser detenido, confesó haber llevado a caboal menos cuatro decapitaciones y múltiples torturas yasesinatos.
El Ponchis fue capturado en Cuernavaca, en diciembre de 2010 ytres años después fue liberado y extraditado a Estados Unidos, yaque tiene nacionalidad estadounidense, para internarlo yposteriormente reinsertarlo a la sociedad.
El informe “Violencia, niñez y crimen organizado”, de laComisión Interamericana de Derechos Humanos, dice que alrededor de30 mil niños y adolescentes trabajan para la delincuencia enMéxico, a partir de los diez años son integrados a lasorganizaciones criminales.
Desde pequeños se les asignan tareas como vigilancia, a los 12años son utilizados para cuidar casas de seguridad y a los 16trabajan en secuestros y sicarios; mientras que las niñas sonutilizadas para empaquetar droga o en la trata de personas confines de explotación sexual.