/ viernes 8 de marzo de 2024

Antena / Medios públicos entre avanzar o estancarse

Por más que se diga y se debate sobre que no existe una vinculación política-económica entre México y Estados Unidos, eso sólo es una polémica ideológica; lo anterior, no implica, que cada país tome sus decisiones de manera independiente y conforme a sus leyes aplicables. Y 2024, es curiosamente uno de esos años, donde coinciden sucesiones presidenciales en ambos países, en el nuestro el 2 de junio son los comicios y en el vecino del norte el 5 de noviembre.

En ese sentido, podríamos analizar desde diversas aristas las semejanzas o diferencias entre los procesos electorales entre México y Estados Unidos, en esta ocasión, particularmente se hará referencia al papel de los medios públicos de los dos países para conocer qué rol que están jugando o que están haciendo.

Mientras los medios públicos en Estados Unidos están viendo cómo actualizarse tecnológicamente y ofrecer mejores servicios a las audiencias, aquí están viendo cómo incidir en la elección, y como adoctrinar a las audiencias en pro del partido oficial.

En efecto, en la Unión Americana se llevó a cabo una cumbre de medios públicos donde analizaron el papel que tienen, y los retos que enfrentarán ante la digitalización, los servicios de streaming, la implementación de tecnologías 5G y la inteligencia artificial, además de que están preocupados sobre cómo llevar mejores contenidos a sus audiencias, resaltando la ventaja de la gratuidad en la televisión abierta en un mundo donde los consumidores se ven afectados por constantes aumentos en las tarifas de suscripción, para Andrew Russell, Director de una de las principales televisoras públicas en California, el contenido sin publicidad y los contenidos locales son diferenciadores clave que distinguen a la radiodifusión pública del streaming, que tiende hacia los servicios con publicidad.

En contraste en México, los medios públicos están siendo señalados de ser propagandistas del Gobierno, fomentando contenidos afines al régimen, incluso el Instituto Nacional Electoral ha señalado el desequilibrio informativo de los medios públicos en la cobertura a la campaña electoral, lo que, además, lo hacen con recursos públicos.

De esta manera se observa, que pese a existir un proceso electoral presidencial en curso, en Estados Unidos piensan en la viabilidad y subsistencia a futuro, para ser una opción atractiva frente al ecosistema digital; mientras que aquí en México, más bien se utilizan los medios públicos para continuar un proyecto político, con miras a tener “chamba” el próximo sexenio, poco interesa si se tiene o no la tecnología para ser competitivos, eso, aquí no importa.

Por más que se diga y se debate sobre que no existe una vinculación política-económica entre México y Estados Unidos, eso sólo es una polémica ideológica; lo anterior, no implica, que cada país tome sus decisiones de manera independiente y conforme a sus leyes aplicables. Y 2024, es curiosamente uno de esos años, donde coinciden sucesiones presidenciales en ambos países, en el nuestro el 2 de junio son los comicios y en el vecino del norte el 5 de noviembre.

En ese sentido, podríamos analizar desde diversas aristas las semejanzas o diferencias entre los procesos electorales entre México y Estados Unidos, en esta ocasión, particularmente se hará referencia al papel de los medios públicos de los dos países para conocer qué rol que están jugando o que están haciendo.

Mientras los medios públicos en Estados Unidos están viendo cómo actualizarse tecnológicamente y ofrecer mejores servicios a las audiencias, aquí están viendo cómo incidir en la elección, y como adoctrinar a las audiencias en pro del partido oficial.

En efecto, en la Unión Americana se llevó a cabo una cumbre de medios públicos donde analizaron el papel que tienen, y los retos que enfrentarán ante la digitalización, los servicios de streaming, la implementación de tecnologías 5G y la inteligencia artificial, además de que están preocupados sobre cómo llevar mejores contenidos a sus audiencias, resaltando la ventaja de la gratuidad en la televisión abierta en un mundo donde los consumidores se ven afectados por constantes aumentos en las tarifas de suscripción, para Andrew Russell, Director de una de las principales televisoras públicas en California, el contenido sin publicidad y los contenidos locales son diferenciadores clave que distinguen a la radiodifusión pública del streaming, que tiende hacia los servicios con publicidad.

En contraste en México, los medios públicos están siendo señalados de ser propagandistas del Gobierno, fomentando contenidos afines al régimen, incluso el Instituto Nacional Electoral ha señalado el desequilibrio informativo de los medios públicos en la cobertura a la campaña electoral, lo que, además, lo hacen con recursos públicos.

De esta manera se observa, que pese a existir un proceso electoral presidencial en curso, en Estados Unidos piensan en la viabilidad y subsistencia a futuro, para ser una opción atractiva frente al ecosistema digital; mientras que aquí en México, más bien se utilizan los medios públicos para continuar un proyecto político, con miras a tener “chamba” el próximo sexenio, poco interesa si se tiene o no la tecnología para ser competitivos, eso, aquí no importa.