Deceso en la familia real holandesa
Falleció la princesa Cristina de Holanda, hija menor de la reina Juliana y del príncipe Bernardo.
La familia real, por lo tanto, está de luto. Nuestras condolencias a sus majestades y a las hermanas de la difunta, entre ellas la exreina Beatriz.
Cristina murió a causa del cáncer de huesos que sufría desde hace varios años. Ella tenía 72 años de edad. Deja tres hijos: Bernardo, Nicolás y Juliana. Se casó con un cubano cuando eso no estaba de moda y menos en la realeza, grabó varios discos como cantante de ópera y consiguió que su ceguera no le Impidiera vivir su vida como quiso, como la infanta Margarita de Borbón, tía del rey de España.
Nacida el 18 de febrero de 1947 en el Palacio de Soestdijk, es la hermana menor de la reina Beatriz de los Países Bajos.
Tiene otras dos hermanas, las princesas Irene y Margarita.
Es invidente casi de nacimiento, pues la reina Juliana contrajo la rubéola durante su gestación. Uno de sus padrinos de bautismo fue sir Winston Churchill.
Con el tiempo, los avances en la medicina permitieron tratamientos que, con la ayuda de unas gafas especiales, provocaron una mejora en su visión para que pudiera asistir a la escuela y vivir una vida relativamente normal. A pesar de esta desventaja inicial, Cristina fue una niña brillante y feliz, con un gran talento para la música. También tenía una capacidad para los idiomas. Es algo frecuente en los invidentes, debido entre otros factores, a su sensibilidad sensitiva y su entrenamiento memorístico. La princesa Cristina estudió Pedagogía y también cantó en el conservatorio, en Montreal (Canadá).
El 28 de junio de 1975 contrajo matrimonio en la Catedral de San Martín de Utrecht con el cubano Jorge Pérez Guillermo (nacido el 1 de agosto de 1946 en La Habana), del que se divorció en 1996.
Los monarcas holandeses, Guillermo Alejandro y Máxima, expresaron su dolor y su pésame en un comunicado en el cual se destaca que ambos sienten la pérdida de su tía porque tenía un corazón cálido, un impulso musical y talento.
Sin duda un gran talento tenía la princesa, qué, además, fue muy querida por la gente.
Ella era consejera de su hermana mayor cuando Beatriz era monarca. En su funeral, la familia real no vistió de luto, algo muy raro porque la fallecida dama dejó por escrito como debían enterrarla. Así ocurrió y como similitud de petición al morir Balduino y Fabiola de Bélgica, ya que ambos también recibieron santa sepultura con las personas y su familia vistiendo de blanco.
Le enviamos, también, el pésame a su excelencia la embajadora Sra. Margriet Nieske Leemhuis y a su esposo por el fallecimiento de su alteza real. Se incineró a la princesa que, fue despedida el jueves posterior a su deceso.
QEPD.
