/ viernes 8 de marzo de 2024

El reto, la omisión y la cruda verdad

Este es un año relevante puesto que hablamos del final de un sexenio de muchos sin sabores, de maltrato continuo a las mujeres, del cierre de estancias infantiles, de miles de recortes a temas prioritarios como la vivienda, la salud y la educación.

Un sexenio de ataque continuo a la democracia y a las instituciones autónomas sin discusión o análisis, pero sí de persecución y acoso permanente a los medios de comunicación que no le aplauden y son objetivos, además de un ataque sistemático de los gobiernos de morena a la oposición. Pero esta no es la historia de los buenos y los malos, eso se resumiría muy fácil y se basaría en juicios de opinión meramente superficiales.

Sin duda muchas y muchos hablamos de México y sus necesidades pero tenemos que poner los puntos claros si lo que estamos buscando es una mejoría para las y los mexicanos de este país que es de todas y todos.

Por eso necesitamos saber cuál es el reto; conquistar a la ciudadanía, trabajar de la mano con ella y escucharla, poniendo como prioridad sus causas, ya que esto abonará a mejorar a nuestro país desde la óptica socialdemócrata y no solo particular.

Sin duda el desgaste de los años y la obsesión de los gobiernos, no todos pero sí algunos, ha burocratizado pero también hecho de la imagen de la política ser negativa, gris y con fines lucrativos cuando no es así, el reto de todas las personas quienes hacemos política es regresar al origen de sus fines que es ser el vínculo con la ciudadanía para mejorar y atender a todas las personas con buenos gobiernos y representantes responsables en los 3 poderes de la nación.

Para ello se requiere romper esquemas, hacer cosas nuevas, estar en territorio y saber escuchar a la gente para romper esos estigmas sociales que el mismo ambiente ha dejado a lo largo de los años para que disminuyan los negativos que hoy tenemos y transformarlos en positivos.

Debe haber comunicación clara y precisa, el marketing sólo debe usarse para lo necesario, hoy en día la gente quiere estar, con quien se identifica o con quien admira, y ese es el reto para la política. Se deben valorar cuadros nuevos, liderazgos con trabajo, mujeres destacadas y líderes que es su tiempo de brillar, al interior de los partidos siempre impera la lucha de fuerza, de poder.

Estas acciones las observa la gente y de manera inmediata la percepción comienza su labor en negativo, necesitamos mejorar la manera de procesar espacios, perfiles, candidaturas y sobre todo fortalecer la formación y exposición de las y los liderazgos de los partidos de manera transversal, sino se verán cuadros grises y mecanismos añejos pero funcionales de clientelismo político en donde el que tenga mas recurso será el que mas oportunidad tenga de posicionarse.

Esto sólo debilita dos ejes básicos que son necesarios para sacar adelante un país: nuestra democracia y la tan anhelada alternancia pero en términos de óptica ciudadana estamos hablando de percepción negativa y más de lo mismo. El gran reto es saber emocionar al electorado y tener palabra para cumplir en cada eje propuesto, sólo así se ganará la confianza en las personas.

Necesitamos comenzar a trabajar enserio , distinto, sumar sin restar y entender que México no es de quien cargue la corona por que no somos monarquía, México es de quien lo defienda, alce la voz y respete la pluralidad, por que guste o no nuestro país es una democracia y la soberanía de ella somos todas y todos. Cambiemos a México aprendiendo a escuchar, a construir y a sumar, de otro modo todo seguirá igual.


Este es un año relevante puesto que hablamos del final de un sexenio de muchos sin sabores, de maltrato continuo a las mujeres, del cierre de estancias infantiles, de miles de recortes a temas prioritarios como la vivienda, la salud y la educación.

Un sexenio de ataque continuo a la democracia y a las instituciones autónomas sin discusión o análisis, pero sí de persecución y acoso permanente a los medios de comunicación que no le aplauden y son objetivos, además de un ataque sistemático de los gobiernos de morena a la oposición. Pero esta no es la historia de los buenos y los malos, eso se resumiría muy fácil y se basaría en juicios de opinión meramente superficiales.

Sin duda muchas y muchos hablamos de México y sus necesidades pero tenemos que poner los puntos claros si lo que estamos buscando es una mejoría para las y los mexicanos de este país que es de todas y todos.

Por eso necesitamos saber cuál es el reto; conquistar a la ciudadanía, trabajar de la mano con ella y escucharla, poniendo como prioridad sus causas, ya que esto abonará a mejorar a nuestro país desde la óptica socialdemócrata y no solo particular.

Sin duda el desgaste de los años y la obsesión de los gobiernos, no todos pero sí algunos, ha burocratizado pero también hecho de la imagen de la política ser negativa, gris y con fines lucrativos cuando no es así, el reto de todas las personas quienes hacemos política es regresar al origen de sus fines que es ser el vínculo con la ciudadanía para mejorar y atender a todas las personas con buenos gobiernos y representantes responsables en los 3 poderes de la nación.

Para ello se requiere romper esquemas, hacer cosas nuevas, estar en territorio y saber escuchar a la gente para romper esos estigmas sociales que el mismo ambiente ha dejado a lo largo de los años para que disminuyan los negativos que hoy tenemos y transformarlos en positivos.

Debe haber comunicación clara y precisa, el marketing sólo debe usarse para lo necesario, hoy en día la gente quiere estar, con quien se identifica o con quien admira, y ese es el reto para la política. Se deben valorar cuadros nuevos, liderazgos con trabajo, mujeres destacadas y líderes que es su tiempo de brillar, al interior de los partidos siempre impera la lucha de fuerza, de poder.

Estas acciones las observa la gente y de manera inmediata la percepción comienza su labor en negativo, necesitamos mejorar la manera de procesar espacios, perfiles, candidaturas y sobre todo fortalecer la formación y exposición de las y los liderazgos de los partidos de manera transversal, sino se verán cuadros grises y mecanismos añejos pero funcionales de clientelismo político en donde el que tenga mas recurso será el que mas oportunidad tenga de posicionarse.

Esto sólo debilita dos ejes básicos que son necesarios para sacar adelante un país: nuestra democracia y la tan anhelada alternancia pero en términos de óptica ciudadana estamos hablando de percepción negativa y más de lo mismo. El gran reto es saber emocionar al electorado y tener palabra para cumplir en cada eje propuesto, sólo así se ganará la confianza en las personas.

Necesitamos comenzar a trabajar enserio , distinto, sumar sin restar y entender que México no es de quien cargue la corona por que no somos monarquía, México es de quien lo defienda, alce la voz y respete la pluralidad, por que guste o no nuestro país es una democracia y la soberanía de ella somos todas y todos. Cambiemos a México aprendiendo a escuchar, a construir y a sumar, de otro modo todo seguirá igual.