/ lunes 14 de agosto de 2023

La Estrategia Nacional de Inteligencia (NIS) 2023

Este trascendental e influyente documento, fue dado a conocer la semana pasada, por Avril D. Haines, Directora Nacional de Inteligencia, del gobierno de los Estados Unidos. Como lo señala en la carta de presentación, se trata de un documento que tiene su origen en los atentados terroristas de septiembre de 2001, que obligó al Estado y sociedad de ese país, a replantear de fondo las estructuras de Defensa, Seguridad e Inteligencia, para procesar de la mejor forma, los antagonismos surgidos a partir de ese acontecimiento.

También en la introducción, la directora de la Oficina Nacional de Inteligencia, señala uno de los principales retos que tienen los sistemas de Inteligencia en las democracias, como la nuestra: el trabajo coordinado y la presentación de resultados oportunos. Ese reto ha sido y sigue siendo, uno de los principales obstáculos para desmontar el falaz y superficial prejuicio de que los Servicios de Inteligencia, representan una parte arcana e incuso peligrosa, para la estabilidad política y social de los sistemas. De allí, que el análisis de la NIS 2023, sea oportuno y de utilidad, para observar la manera en que los Estados Unidos procura con la información disponible, generar los documentos y propuestas para prevenir, e incuso, neutralizar las potenciales afectaciones a sus intereses y poder nacionales.

Se trata de un breve, pero sustancioso documento de 20 páginas, de las cuales solamente 10 son de texto, que contienen, a su vez, los seis objetivos prioritarios en materia de Inteligencia para la Seguridad y Defensa Nacionales, así como un ilustrativo esquema de la articulación entre las diversas áreas y dependencias de la estructura administrativa del Estado estadounidense. Cabe destacar el subrayado acento apartidista de los planteamientos y metas, no obstante el darse a conocer en pleno proceso preelectoral por la Presidencia de la República. Este aspecto es de particular relevancia, pues los intereses nacionales, de ninguna manera, pueden o deben quedar anclados a las aspiraciones del gobierno, partido y grupo en turno en el ejercicio del poder político.

Por supuesto, son explícitas las referencias a los adversarios georegionales, como son la República Popular de China y Rusia. Más aún, en el tan complicado como peligroso conflicto bélico derivado de la invasión rusa a Ucrania. De particular interés para México, es el Objetivo 5 referido a los desafíos y antagonismos internacionales, mismos que significan y orientan buena parte de la agenda del conglomerado de agencias civiles y militares de los Estados Unidos. En ese apartado, se menciona de manera específica, los retos procedentes de la actividad del narcotráfico junto con otras prácticas criminales. Pero la atención se centra tanto en los niveles de corrupción que aquellas generan, así como las consecuencias sobre la salud pública del país.


La llamada Comunidad de Inteligencia, desde la perspectiva que significa el trabajo de colaboración y cooperación entre las agencias civiles y militares, debe contar con las capacidades para actuar con anticipación a las dinámicas que afecta el presente y de forma potencial, el futuro de Estados Unidos. Se trata de un documento, sin duda, que debe analizarse y estudiar con detenimiento.


javierolivaposada@gmail.com

@JOPso


Este trascendental e influyente documento, fue dado a conocer la semana pasada, por Avril D. Haines, Directora Nacional de Inteligencia, del gobierno de los Estados Unidos. Como lo señala en la carta de presentación, se trata de un documento que tiene su origen en los atentados terroristas de septiembre de 2001, que obligó al Estado y sociedad de ese país, a replantear de fondo las estructuras de Defensa, Seguridad e Inteligencia, para procesar de la mejor forma, los antagonismos surgidos a partir de ese acontecimiento.

También en la introducción, la directora de la Oficina Nacional de Inteligencia, señala uno de los principales retos que tienen los sistemas de Inteligencia en las democracias, como la nuestra: el trabajo coordinado y la presentación de resultados oportunos. Ese reto ha sido y sigue siendo, uno de los principales obstáculos para desmontar el falaz y superficial prejuicio de que los Servicios de Inteligencia, representan una parte arcana e incuso peligrosa, para la estabilidad política y social de los sistemas. De allí, que el análisis de la NIS 2023, sea oportuno y de utilidad, para observar la manera en que los Estados Unidos procura con la información disponible, generar los documentos y propuestas para prevenir, e incuso, neutralizar las potenciales afectaciones a sus intereses y poder nacionales.

Se trata de un breve, pero sustancioso documento de 20 páginas, de las cuales solamente 10 son de texto, que contienen, a su vez, los seis objetivos prioritarios en materia de Inteligencia para la Seguridad y Defensa Nacionales, así como un ilustrativo esquema de la articulación entre las diversas áreas y dependencias de la estructura administrativa del Estado estadounidense. Cabe destacar el subrayado acento apartidista de los planteamientos y metas, no obstante el darse a conocer en pleno proceso preelectoral por la Presidencia de la República. Este aspecto es de particular relevancia, pues los intereses nacionales, de ninguna manera, pueden o deben quedar anclados a las aspiraciones del gobierno, partido y grupo en turno en el ejercicio del poder político.

Por supuesto, son explícitas las referencias a los adversarios georegionales, como son la República Popular de China y Rusia. Más aún, en el tan complicado como peligroso conflicto bélico derivado de la invasión rusa a Ucrania. De particular interés para México, es el Objetivo 5 referido a los desafíos y antagonismos internacionales, mismos que significan y orientan buena parte de la agenda del conglomerado de agencias civiles y militares de los Estados Unidos. En ese apartado, se menciona de manera específica, los retos procedentes de la actividad del narcotráfico junto con otras prácticas criminales. Pero la atención se centra tanto en los niveles de corrupción que aquellas generan, así como las consecuencias sobre la salud pública del país.


La llamada Comunidad de Inteligencia, desde la perspectiva que significa el trabajo de colaboración y cooperación entre las agencias civiles y militares, debe contar con las capacidades para actuar con anticipación a las dinámicas que afecta el presente y de forma potencial, el futuro de Estados Unidos. Se trata de un documento, sin duda, que debe analizarse y estudiar con detenimiento.


javierolivaposada@gmail.com

@JOPso