Hoy se cumplen tres años del triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador en las elecciones presidenciales de 2018. Actualmente se encuentra fortalecido electoralmente después de las elecciones intermedias de junio, sin embargo, a pesar de que ganó muchas posiciones, el panorama para lo que resta del sexenio se le puede complicar, no por los partidos de oposición, sino por una sociedad de clase media que despertó del letargo y por unos medios de comunicación más críticos y masivos.
Los costos de gobernar, los errores propios y de su gabinete, así como las rupturas internas están provocando que el 2024 se ensombrezca. La idea era disminuir el voto a los partidos adversarios, y lo lograron pero, ahora la verdadera oposición y contrapeso se trasladó a los medios de comunicación y a una parte de la sociedad.
Es así que López Obrador llega a la celebración de su tercer aniversario con buenos números en materia electoral. Ganó 11 gubernaturas de 15 que se disputaron y, aunque su partido compitió contra la alianza Va por México, estos partidos juntos no pudieron ganar una sola gubernatura. Cinco mujeres consiguieron gobernar sus estados abanderadas por Morena y sus aliados, mientras sólo llegó una por parte de la oposición. En cuanto a la cámara de diputados, su coalición fue la más votada, con 43% de los votos emitidos. Asimismo, el partido tendrá mayoría en 18 congresos locales.
En el terreno los números de Morena y el presidente son adversos, sólo ganó 13 de 29 capitales y perdió alcaldías y municipios en donde Morena ya gobernaba, principalmente en la capital del país.
En Enkoll desarrollamos una encuesta trimestral que titulamos AMLÓMETRO donde hemos dado puntual seguimiento a la aprobación del presidente y hemos medido la afinidad partidista de los mexicanos durante este sexenio, López Obrador generó expectativas altas al llegar al poder, con una aprobación como presidente electo de 75% en octubre de 2018, mes en el que iniciamos con la encuesta nacional AMLÓMETRO.
La alta aprobación del presidente ha sido redituable para su partido. Morena se ha mantenido como el partido político de mayor afinidad en México. En el promedio de estos tres años, 30% se ha identificado con Morena contra un 11% del PAN, 9.1% del PRI, 3.2% del PRD y un 36% que se declara como apartidistas.
Esto significa que Morena ha mantenido su voto duro mayoritario durante estos tres años pues no ha bajado de un 24% de afinidad partidista durante el mandato de AMLO; mientras que los partidos políticos de oposición no han superado un 16% de afinidad en este tiempo y, por lo tanto, no han sabido aprovechar la cantidad de mexicanos que no se siente identificado con ningún partido político.
En contraste, los partidos de oposición no han logrado articular una propuesta atractiva a nivel nacional para un electorado que ofrezca una alternativa distinta a los ciudadanos. Ante el vacío de los partidos y organizaciones, son 3 años donde por primera vez en el país la oposición son los medios de comunicación y el periodismo de investigación. Los medios son los que realmente están incrementando su credibilidad y penetración, con lo que ahora se hace mejor periodismo opositor a los gobiernos de todos los partidos.
Andrés Manuel López Obrador entra a la segunda mitad de su sexenio con números positivos, aunque con un capital político mermado por derrotas simbólicas como la pérdida de alcaldías en la capital del país, y el Estado de México. El presidente debe dejar las descalificaciones hacia los medios de comunicación y las clases medias del país ya que entre más adverso sea su discurso contra ellos, más crecimiento tendrán en credibilidad y podrían convertirse en una oposición que lo supere electoralmente.
Directora de Enkoll