Recuerdan en L.A el inicio de una leyenda...The Doors

Agencia EFE

  · viernes 6 de enero de 2017

The Doors

La ciudad de Los Ángeles rindió ayer homenaje a la leyenda yel legado de una de sus bandas más ilustres al proclamar el pasado4 de enero como el “Día de The Doors”, una declaraciónoficial que tuvo lugar aprovechando el 50 aniversario del discodebut del grupo comandado por Jim Morrison.

Los dos miembros con vida de The Doors, John Densmore y RobbyKrieger, asistieron junto a familiares de los fallecidos Morrison yRay Manzarek a una ceremonia en la playa de Venice, un lugar muyligado a los inicios del grupo.

Más de 400 personas se congregaron bajo el icónico letrero deVenice, en el cruce de las avenidas Pacific y Windward, para vercómo una señal luminosa con el logotipo de The Doors se iluminabaen un atardecer frío y con un poco de lluvia.

John Densmore y Robby Krieger, que se mostraron orgullosos deser “nativos de Los Ángeles”, recordaron algunas anécdotas deVenice relacionadas con The Doors, como el apartamento que teníaRay Manzarek que costaba 75 dólares al mes o el café que inspiróla canción Soul Kitchen (Alma de Cocinero).

También rememoraron la azotea, “sin televisión niteléfono”, a la que se subía Jim Morrison y que dio pie aversos como los de Moonlight Drive, que recitaron el pasadomiércoles sobre el escenario: “Nademos hacia la Luna, escalemosa través de la marea, entremos en la noche que la ciudad dormidaesconde”. MUJER DE L.A.

“Voy a demostrar que no era el cantante sino el baterista,bromeó John Densmore antes de abordar una versión acústica de lacanción L.A. Woman con Robby Krieger a la guitarra.

También intervino el concejal de Los Ángeles Mike Bonin, queseñaló que hace medio siglo se editó un disco, el primero de TheDoors, que “transformó el rock and roll en todo el mundo”.

“Los Ángeles y Venice no podrían estar más orgullosos deser el lugar de nacimiento de The Doors”, añadió el político,quien también aseguró que escuchar sus canciones te lleva “aotro lugar, a una tierra de fantasía, imaginación y placer”.Seguidores de todas las edades, desde viejos rockeros aadolescentes, y de todos los estilos, desde fans de Pink Floyd yThe Who a amantes de Slipknot o Black Sabbath, se unieron el pasadomiércoles para saludar la obra e influencia de una de las bandascruciales de la contracultura californiana de los años 60.

Estos aficionados llevaron el miércoles todo lo que tuvieran amano con el nombre de The Doors o con el amenazador y seductorrostro de Morrison, como camisetas, discos, gorros, pósters,libros y hasta matrículas personalizadas de coches. MÁSALLÁ DE LA FAMA

La autenticidad de The Doors, que no buscaran la fama sino algomás allá y la profundidad de sus letras fueron algunos de lospuntos que destacaron los fans sobre la importancia musical de labanda.

“¿Bromeas? Nunca me habría perdido la oportunidad de estarhoy (el pasado miércoles) aquí”, dijo a Efe Alice Palombella,una joven italiana seguidora de The Doors que vive en LosÁngeles.

“Crecí con ellos porque son también la banda favorita de mimadre”, añadió Palombella, quien subrayó asimismo que lasletras del grupo son “como poemas” y opinó que hay gente queconecta con The Doors y gente que “nunca lo hará”. ELÁLBUM

Editado el 4 de enero de 1967, el álbum The Doors fue laasombrosa carta de presentación de una banda que unía el rock, eljazz, el blues y ciertos detalles de psicodelia como sostén paralas enigmáticas letras de Morrison.

Gracias a canciones como Break on Through (To the Other Side),Light My Fire o The End, The Doors salieron del circuito de salasdel Sunset Strip para convertirse en estrellas no solo por laelectricidad de su música, con los sinuosos teclados de Manzarekal frente, sino también por la polémica que suscitaban a cadapaso que daban.

Entre desórdenes públicos y escándalos de diverso tipo,quedó para la historia la controvertida aparición de The Doors enel show televisivo nacional de Ed Sullivan en 1967, en el queMorrison rechazó cambiar y cantó en directo un verso de Light MyFire relacionado con el consumo de drogas.

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