/ miércoles 8 de diciembre de 2021

Goran Bregović, el intérprete de punk ahora difunde el folclore

Goran Bregović, exponente del glam rock en su juventud, ahora muestra en sus viajes por el mundo el folclore de los Balcanes 

Hay rostros que dicen lo indecible, como el de Goran Bregović. Cuando habla, no es suficiente escucharlo. A esta clase de hombres que aseguran hacer música bastarda y que provienen de países que ya no existen, hay que percibirlos de otra manera. Porque sus ojos, extraviados, contrastan con sus palabras, que salen disparadas con la precisión de misiles en guerra.

El mayor exponente de la música balcánica, es contundente: “La democracia es una buena idea como cualquier otra, pero simplemente no funciona”.

Así lo asegura en entrevista con El Sol de México. Esta vez apunta al mundo moderno: “La democracia sólo funciona en países como Suecia o Noruega. Donde los salarios son bajos, no puede haber democracia, porque todo puede corromperse”.

Hizo punk y rock en plena dictadura yugoslava. Su grupo, Bijelo Dugme, le puso ritmo a un mundo que prefería los grises sobre el tecnicolor capitalista.

Aquel joven con mucho glam hoy es un hombre de 71 años que conserva su cabellera larga como ofrenda a los viejos tiempos. Lejos quedó la música pop: ahora Goran es más cercano al folclore balcánico, de dónde es el comandante de enormes bandas que parecen sacadas de Oaxaca, Guerrero o Sinaloa.

La música que une

No son pocos los vasos comunicantes entre México y la vieja Yugoslavia. En el antiguo régimen de Tito, las rancheras, las películas de la Revolución y las telenovelas de Verónica Castro eran sumamente populares, según el libro Muy buenas noches. México, la televisión y la Guerra Fría (FCE, 2012).

América Latina es un lugar donde la música es importante, no una simple decoración. Siempre es bueno tocar para gente que se toma en serio la música”, dice Bregović poco antes de actuar en el Teatro Manuel Doblado de León, Guanajuato, donde presentó su disco Letters from Sarajevo, que llega a 30 años de la Guerra de los Balcanes, uno de los mayores conflictos bélicos de la historia.

Y si alguien conoció las fauces de la guerra fue Bregović. Por eso quizá no se inmuta cuando se le dice que Guanajuato es el punto más violento de México a causa del narcotráfico, cuyos conflictos internos y externos contra el gobierno han dejado más de 300 mil muertos desde 2006, según cálculos oficiales.

El Sol de Zacatecas

Goran Bregović suma más de tres mil conciertos al rededor del mundo / Flor Castañeda

“Es una realidad que no es exclusiva de México… Pero la música está muy alejada de la barbarie”, dice con cierta indiferencia, que se desvanece en cuanto salta a la plática la democracia.

“Me inclino más por un modelo aristotélico (de la política), porque la democracia simplemente no funciona. Es corruptible y excluye a mucha gente”, afirma el compositor.

Desde su trinchera, ha trabajado con músicos como Iggy Pop, Cesaria Evora y los Gypsy Kings. Celebra que haya espacios para artistas como él, que parten de lo autóctono para influir en lo más comercial. A eso él lo define como "un pequeño milagro".

Hace unos días estuvo en el Festival Internacional de Arte Contemporáneo de León, pero ahora está en Siberia, listo para ofrecer su último show del año. Luego irá a Grecia y a Australia. Goran es un forajido que hace, de sus canciones y sus viajes, una patria.

“Sé que muchos DJ’s de América Latina trabajan con la música balcánica. Y es que en América Latina la música nunca es suficiente. Es como en los Balcanes: necesitas algo de locura para ser bueno en lo que haces”, afirma.

Observar sus arrugas es contemplar las grietas de la historia. No siempre se tiene la oportunidad de conversar con alguien que proviene de una tierra donde aún abundan las etiquetas nacionalistas —bosnios, serbios, croatas, kosovares. Él, sin embargo, se asume yugoslavo. Muy a su manera.

➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo

“No pasará, pero imagina que un día México desaparece como país. Te darás cuenta que tu patria ya no existe geográfica ni políticamente, pero sí como un territorio emocional. Para mí Yugoslavia es eso: un espacio emocional. Tengo que mostrar mi pasaporte todo el tiempo y decir: de aquí soy”.

Bregović tiene una idea muy clara del planeta en el que vive: “Lo están arruinando”. Y si hay alguien que conoce el mundo de Siberia a Nueva York es él: El músico que emergió de la extinta Yugoslavia para llevar la tragedia festiva de los Balcanes a todo el mundo.

Sin más documentos migratorios que sus canciones, Goran Bregović es una radiografía de los tiempos.

Hay rostros que dicen lo indecible, como el de Goran Bregović. Cuando habla, no es suficiente escucharlo. A esta clase de hombres que aseguran hacer música bastarda y que provienen de países que ya no existen, hay que percibirlos de otra manera. Porque sus ojos, extraviados, contrastan con sus palabras, que salen disparadas con la precisión de misiles en guerra.

El mayor exponente de la música balcánica, es contundente: “La democracia es una buena idea como cualquier otra, pero simplemente no funciona”.

Así lo asegura en entrevista con El Sol de México. Esta vez apunta al mundo moderno: “La democracia sólo funciona en países como Suecia o Noruega. Donde los salarios son bajos, no puede haber democracia, porque todo puede corromperse”.

Hizo punk y rock en plena dictadura yugoslava. Su grupo, Bijelo Dugme, le puso ritmo a un mundo que prefería los grises sobre el tecnicolor capitalista.

Aquel joven con mucho glam hoy es un hombre de 71 años que conserva su cabellera larga como ofrenda a los viejos tiempos. Lejos quedó la música pop: ahora Goran es más cercano al folclore balcánico, de dónde es el comandante de enormes bandas que parecen sacadas de Oaxaca, Guerrero o Sinaloa.

La música que une

No son pocos los vasos comunicantes entre México y la vieja Yugoslavia. En el antiguo régimen de Tito, las rancheras, las películas de la Revolución y las telenovelas de Verónica Castro eran sumamente populares, según el libro Muy buenas noches. México, la televisión y la Guerra Fría (FCE, 2012).

América Latina es un lugar donde la música es importante, no una simple decoración. Siempre es bueno tocar para gente que se toma en serio la música”, dice Bregović poco antes de actuar en el Teatro Manuel Doblado de León, Guanajuato, donde presentó su disco Letters from Sarajevo, que llega a 30 años de la Guerra de los Balcanes, uno de los mayores conflictos bélicos de la historia.

Y si alguien conoció las fauces de la guerra fue Bregović. Por eso quizá no se inmuta cuando se le dice que Guanajuato es el punto más violento de México a causa del narcotráfico, cuyos conflictos internos y externos contra el gobierno han dejado más de 300 mil muertos desde 2006, según cálculos oficiales.

El Sol de Zacatecas

Goran Bregović suma más de tres mil conciertos al rededor del mundo / Flor Castañeda

“Es una realidad que no es exclusiva de México… Pero la música está muy alejada de la barbarie”, dice con cierta indiferencia, que se desvanece en cuanto salta a la plática la democracia.

“Me inclino más por un modelo aristotélico (de la política), porque la democracia simplemente no funciona. Es corruptible y excluye a mucha gente”, afirma el compositor.

Desde su trinchera, ha trabajado con músicos como Iggy Pop, Cesaria Evora y los Gypsy Kings. Celebra que haya espacios para artistas como él, que parten de lo autóctono para influir en lo más comercial. A eso él lo define como "un pequeño milagro".

Hace unos días estuvo en el Festival Internacional de Arte Contemporáneo de León, pero ahora está en Siberia, listo para ofrecer su último show del año. Luego irá a Grecia y a Australia. Goran es un forajido que hace, de sus canciones y sus viajes, una patria.

“Sé que muchos DJ’s de América Latina trabajan con la música balcánica. Y es que en América Latina la música nunca es suficiente. Es como en los Balcanes: necesitas algo de locura para ser bueno en lo que haces”, afirma.

Observar sus arrugas es contemplar las grietas de la historia. No siempre se tiene la oportunidad de conversar con alguien que proviene de una tierra donde aún abundan las etiquetas nacionalistas —bosnios, serbios, croatas, kosovares. Él, sin embargo, se asume yugoslavo. Muy a su manera.

➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo

“No pasará, pero imagina que un día México desaparece como país. Te darás cuenta que tu patria ya no existe geográfica ni políticamente, pero sí como un territorio emocional. Para mí Yugoslavia es eso: un espacio emocional. Tengo que mostrar mi pasaporte todo el tiempo y decir: de aquí soy”.

Bregović tiene una idea muy clara del planeta en el que vive: “Lo están arruinando”. Y si hay alguien que conoce el mundo de Siberia a Nueva York es él: El músico que emergió de la extinta Yugoslavia para llevar la tragedia festiva de los Balcanes a todo el mundo.

Sin más documentos migratorios que sus canciones, Goran Bregović es una radiografía de los tiempos.

Política

Senado prohíbe y sanciona las terapias de conversión en México

Las sanciones se aplicarán a quienes realicen, obliguen o financien cualquier tipo de tratamiento, terapia o práctica que restrinja la orientación sexual

Política

Jueces deben estar protegidos para no ceder ante amenazas del crimen organizado: Lenia Batres

La ministra dice que al interior de la Suprema Corte comentan sobre protección a juzgadores

Sociedad

AMLO planea entregar el 1 de julio el primer pago del Fondo de Pensiones

El presidente dijo aún falta que la ley del Fondo de Pensiones para el Bienestar sea publicada y se definan los procedimientos de su operación

Mundo

Joe Biden está dispuesto a enfrentarse a Trump en un debate

Por primera vez, el presidente de EU anunció sus intenciones de participar en un debate; anteriormente lo había condicionado al comportamiento de Trump

Finanzas

Desempleo alcanza a 1.4 millones de mexicanos en marzo

Uno de cada 10 mexicanos buscó un empleo por más de tres meses, mientras que uno de cada 10 lo hizo por más de un mes

Elecciones 2024

Candidatos de la CDMX pelean por presuntas calumnias

El término cártel inmobiliario potenció la discordia entre los equipos de Brugada y Taboada