A finales de 2021, el precio promedio nacional de los tacos y las tortas en México aumentó hasta nueve por ciento, el más alto desde que se tiene registro para un cierre de año, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El aumento en estos alimentos fue motivado por el alza en los ingredientes de su preparación, como las carnes, chiles, tortillas, limones, entre otros insumos, que al cierre de año aumentaron hasta 84 por ciento anual. Por ejemplo, en taquerías de la Ciudad de México y el Área Metropolitana una orden de dos tacos de carnitas y un refresco costaba 55 pesos en diciembre de 2020, pero hasta hace unas semanas este paquete escaló a los 75 pesos.
En las torterías y fondas de la capital la orden de una torta de jamón con queso y un refresco ahora vale casi 60 pesos, pero en diciembre de hace un año su precio iba desde los 54 pesos.
Lo anterior quiere decir que una persona tiene que destinar entre 34 y 44 por ciento de un salario mínimo de 172.87 pesos para poder consumir alguno de estos dos paquetes de alimentos.
Esto también equivale a por lo menos tres horas y media de trabajo al día para que una persona pueda comprarse una orden de tacos o una torta y un refresco.
Los paquetes más costosos registrados por el Inegi indican que una orden de tacos, un alambre y un refresco chico valen 141 pesos, el equivalente a un aumento de 20 pesos frente a diciembre de 2020.
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Locatarios consultados por este diario manifestaron que hicieron un “ajuste” en sus precios, principalmente, a raíz del aumento en el costo del gas LP, incluso con la entrada del Gas Bienestar a la alcaldía Iztapalapa, para poder preparar sus productos al público.
Los precios más bajos reportados por el Inegi señalan que hay torterías que ofrecen una torta grande de pollo y un refresco por 39 pesos o una torta de huevo y un refresco de 600 mililitros por 47 pesos.
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