El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó el jueves que "el orden debe prevalecer", en referencia a las protestas estudiantiles contra la guerra en Gaza que sacuden a las universidades del país y han dejado numerosos detenidos.
Policías y estudiantes se enfrentaron la madrugada del jueves en la Universidad de California en Los Angeles (UCLA) durante el desalojo de las barricadas levantadas por los manifestantes, la más recietne intervención policial de este tipo en los últimos días.
"No somos un país autoritario que silencia a la gente o sofoca la diferencia", afirmó Biden en un discurso televisado desde la Casa Blanca.
"Pero tampoco somos un país sin ley", agregó. "Somos una sociedad civilizada y el orden debe prevalecer", aseguró el mandatario, para quien no se pueden permitir protestas que interrumpan las clases y actos de graduación de miles de estudiantes en todo el país.
En la UCLA, agentes con equipos antimotines derribaron la barricada de madera que protegía el campamento levantado en el campus, arrastraron las carpas y utilizaron bombas de estruendo para dispersar a los manifestantes. A varios se los llevaron detenidos, constató la AFP.
Estas manifestaciones se han extendido a por lo menos 30 universidades estadounidenses desde el mes pasado, para protestar por la gran cantidad de muertos en la Franja de Gaza en la guerra entre Israel y el movimiento islamista Hamas.
Las autoridades universitarias intentan equilibrar los derechos de libertad de expresión con las quejas de que las concentraciones han derivado en antisemitismo y odio.
"Esta es una protesta pacífica. (...) llamar a la policía es algo despreciable", dijo a la AFP Jack Bedrosian, un residente de Los Angeles que se acercó a la zona para expresar su apoyo a los estudiantes.
El martes por la noche, las fuerzas de seguridad fueron criticadas en cambio por intervenir tardíamente ante violentos choques que se registraron cuando contramanifestantes atacaron el campamento de los estudiantes propalestinos en la universidad.
Debido a la "emergencia" en el campus, la UCLA determinó que las clases fueran remotas jueves y viernes.