Dreamers por muro, condiciona Donald Trump

La Casa Blanca divulgó su lista de “prioridades legislativas”

Por Agencias

  · lunes 9 de octubre de 2017

LA LISTA fue vista como una victoria del núcleo más duro de asesores de Trump / Foto: Reuters

WASHINGTON, DC. El presidente estadounidense Donald Trump condicionó ayer su apoyo a un alivio migratorio para unos 800 mil jóvenes migrantes o “dreamers” a que el Congreso apruebe los fondos completos para construir un muro en la frontera con México y nuevos límites a la migración legal.

La Casa Blanca divulgó su lista de “prioridades legislativas”, que incluye además cambios para facilitar la deportación de niños migrantes centroamericanos, una ofensiva contra quienes rebasen los términos de sus visas, y más recursos para detenciones y deportaciones migratorias.

La lista la completan una reforma al sistema de asilo para evitar fraudes, la obligatoriedad del uso del programa de verificación laboral “E-Verify”, el combate a las llamadas “ciudades santuario” y más fondos para el cumplimiento de leyes migratorias en todo el país.

Igualmente, plantea la creación de un sistema migratorio basado en méritos y no en la reunificación de cónyuges o hijos.

“MURO COMPLETO”

“Las prioridades incluyen en primero lugar seguridad fronteriza… para nosotros eso significa un financiamiento completo para la construcción del muro fronterizo”, señaló el director legislativo de la Casa Blanca, Mark Short.

“Estamos pidiendo que estas prioridades sean incluidas en cualquier legislación sobre el estado del DACA (programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), o de otra manera la migracion ilegal y la migración en cadena probablemente aumentarán”, subrayó.

“Es importante ver este paquete como un algo holístico… Es un grupo completo de reformas que trabajan juntas para crear un sistema migratorio que necesitamos”, dijo un alto funcionario de la Casa Blanca.

La lista fue vista como una victoria del núcleo más duro de asesores de Trump, encabezado por Stephen Miller, que desde el inicio de la administración han abogado por endurecer las políticas contra la migración legal e ilegal, y provocó el rechazo airado de los demócratas, quienes se dijeron dispuestos a negociar pero esta lista fue “más allá de lo razonable”.