/ sábado 8 de julio de 2017

Satiricosas

¡Nos van a arreglar el mundo! El G 20 se formó en diciembre de 1999 para estudiar una solución a las crisis financieras, sobre todo de países “emergentes”, en la década de 1990. Se quería reunir a todos los ministros de Finanzas y gobernadores de Bancos Centrales para lograr “una concertación internacional en materia económica”.

El G 20 no es una organización internacional, pero sí una instancia y lugar de encuentros y decisiones comunes. Vamos a ver hoy quién se encuentra con quién -y de momento ese es el chisme principal y ya empezó el lío con nosotros-. Algunos reporteros internacionales publicaron que al verse con Trump, Peña Nieto dijo que ¡SÍ  pagaría México el MURO! ¿Qué necesidad de hacerse bolas en Hamburgo para un asunto entre vecinos en América? Peña bien pudo decirle al gringo cuando salió el tema a relucir algo como: No vamos a hablar de eso aquí. Sino en nuestro continente.

En 2008, en la Cumbre del 20 en Washington, cuando mucha gente por la burbuja de la construcción en Estados Unidos, perdió sus fortunas o gran parte de ellas, el mundo vivió la mayor crisis económica desde la II Guerra, ah, pero “los jefes de Estado se pusieron de acuerdo sobre un plan de acción excepcional para evitar el colapso del sistema financiero y de la economía mundial”.

Desde entonces, el G 20 se ha reunido con regularidad en Londres en abril de 2009, en Pittsburgh, USA,  en septiembre del mismo año, así de bien andaban las cosas. En Seúl, Corea, en noviembre de 2010, en Cannes, Francia, el 3 y 4 de noviembre 2011, en Los Cabos, México, el 18 y 19 de junio de  2012. San Petersburgo 2013. Brisbane Australia, noviembre 2014. Antalya, Turquía, 2015. Hangzhou, Cina,  4 y 5 de septiembre de 2016, Hamburgo, Alemania, 7 y 8 de julio de 2017. Y la próxima será en Argentina en 2018 y piensa que la presidirá el presidente Macri, uno de sus esbirros. Pero… quien sabe si llegue porque no lo quieren en su país, como lo demuestran las manifestaciones en su contra. El G 20 O TODOS LOS TIBURONES JUNTOS

Representa el 85% de la economía mundial y dos tercios de la población mundial. Para ampliar lo dicho el sábado pasado en este espacio, veamos por orden alfabético quiénes asisten al huateque: África del Sur, Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Turquía y la Unión Europea.

Los miembros del “club” pueden cada año invitar a un cierto número de invitados. En principio eran cinco de otros países. Curiosamente España es un invitado permanente. También pueden invitar  organizaciones locales y desde luego cuentan con la colaboración y experiencia de organizaciones internacionales:

El Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM), la Organización Mundial del Trabajo (OIT), la Organización Mundial de Comercio (OMC), el Consejo de Estabilidad Financiera, la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), presidida por el mexicano Ángel (de la Dependencia) Gurría, jugoso puesto en donde lo pudo haber depositado Carlos Salinas para agradecerle su apoyo a media docena de canalladas durante su gobierno. MÉXICO LINDO Y QUERIDO

Habría que ver para qué sirvieron esas reuniones en cada caso, pero la de 2012 en Los Cabos, México, para  muy poco. Para inflarle el ego a Calderón y hacerle gastar dinerales en la preparación de su último “glorioso” evento, en el que botó 10 mil millones de dólares de NUESTRAS RESERVAS.

Por evidentes órdenes del Banco de México, la redacción de La Jornada, el jueves 21 de junio de 2012, describió así el asunto: “Como parte de los acuerdos de la Cumbre del G 20, el presidente Felipe Calderón anunció la participación del país en el esfuerzo internacional por fortalecer una recuperación más rápida de la estabilidad y a la capacidad de crecimiento de la economía mundial la capacidad de crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI), informó el Banco de México (BdeM)”.

México obediente “presentó una agenda de trabajo de orientación ortodoxa, influida por la visión de organismos como la OCDE y el FMI”. En palabras usuales actuó como “gato”, no como un país anfitrión con exigencias propias para sí mismo y para sus aliados que debieron ser los países latinoamericanos. El edificio en que se llevó a cabo la reunión costó 1,200 millones  de pesos de entonces. Y hoy está abandonado. Jamás detonó el ansiado turismo “de convenciones” que tanto se anunció durante la construcción. Además el ciclón Odile lo dañó y no quisieron en BC molestarse en arreglarlo. Se califica de “desolador” el panorama físico. ¿Y el moral?

El académico doctor José Antonio Cerro Castiglione, economista de la Universidad Iberoamericana, lo explicó así: “México incrementará su capacidad de voto en el Fondo Monetario Internacional (FMI) y podría evitar muchos de los esquemas de gran condicionalidad que atan a los préstamos de este organismo, con el aumento de sus aportaciones, que ahora serán de 10 mil millones de dólares”.

“Al aportar más dinero al Fondo, México podrá tener un mayor protagonismo en la toma de decisiones importantes, un beneficio que también será extensivo para China, India y Brasil, los otros países emergentes que más aumentaron sus cuotas al FMI, al sumar, los cuatro, 73 mil millones de dólares. ( Los Cabos, BC, México  2012).

“Con esa inyección de dinero, en total 455 mil 900 millones de dólares (proveídos por 37 países), la institución dirigida por Christine Lagarde se fortalecerá financieramente, y de algún modo podrá convertirse en la organización internacional que continuará con un papel decisivo en la superación de la actual crisis económica”.

(…) El reforzamiento de la capacidad de préstamo del FMI, como institución financiera y económica internacional, fue uno de los temas tratados en el encuentro al que se dieron cita los jefes de Estado y de gobierno de las economías desarrolladas y emergentes. (…) La reunión no fue fácil, pero sí productiva, ya que se alcanzaron acuerdos importantes -que deberán sacarse adelante-, como priorizar y garantizar un plan de crecimiento y empleo, sin dejar de lado la necesidad de regularizar la situación fiscal, la deuda y el déficit gubernamental, añadió el profesor del Departamento de Estudios Empresariales. (…) Entre los puntos de confrontación y temas sin resolver está el que algunos países, pese a haber firmado compromisos, decidieron incrementar el proteccionismo y las limitaciones al funcionamiento de los mercados de tipo de cambio, prácticas que deben superarse, como reclamaron algunos funcionarios reunidos en el puerto mexicano.  ( …) También se habló de la seguridad alimentaria, los mercados de energía (en particular el petrolero), y se reafirmó la preocupación que tienen todos por la situación en Europa.

¡Lagarde se veía radiante! Y no era para menos. Después de su pleitazo por el puesto con su paisano Strauss-Kahn, anterior director del FMI, al que  los gringos acusaron de haber violado una empleada de un hotel de NY (preguntemos al gran Assange lo que logran con semejante argumento), no pudo conservar la Dirección del FMI. Los Cabos y el rendimiento a sus pies de nuestro candidato al mismo puesto, el Señor Carstens del Banco de México, le deben de haber sabido a gloria. Nacida en París en 1956, hizo sus estudios iniciales en USA y así fue como se convirtió en su consentida, en “la francesa más gringa” que ellos  querían en ese puesto.